El cambio de dirigente en el sector popular del PRI, actualmente FNOC y quizá en corto tiempo CNOP de nueva cuenta, queda pospuesto hasta nuevo aviso. Tal vez hasta después de febrero del próximo año.
Este es probablemente el mensaje más importante de la reunión que ayer sostuvieron los miembros de la dirigencia nacional del sector popular con el presidente del PRI, Santiago Oñate Laborde.
El encuentro fue programado para analizar la participación de los integrantes de la actual Federación Nacional de Organizaciones y Ciudadanos en la recientemente concluida 17 Asamblea Nacional priísta, así como los resultados de sus aportaciones a los documentos básicos del partido.
No se trata de una cuestión menor. Según análisis propios --que pueden ser desmentidos por los otros dos sectores priístas, el campesino y el obrero-- 60 por ciento de los cambios internos aprobados en esa asamblea fueron sugeridos por militantes de la FNOC, y muchos de ellos van más allá de las cuestiones de forma en la selección de candidatos y dirigentes.
Muy a pesar de lo que desean los dirigentes priístas, de que lo trascendente sean los cambios de fondo y no de forma, de nueva cuenta en la sesión de ayer lo que mayor impactó no fueron las aportaciones de la FNOC a la democratización interna de su partido, sino que el encuentro haya constituido una virtual ratificación de su secretario general, el senador por San Luis Potosí, Carlos Jiménez Macías.
Según versiones que habían circulado con profusión durante los últimos días, Jiménez Macías sería pronto relevado del cargo y su sitio ocupado por la ex secretaria general del SNTE y actual presidenta de la organización que agrupa a los educadores del continente, Elba Esther Gordillo.
Ese cambio parece haber sido pospuesto para ``mejor ocasión'', y ésta sería después de febrero de 1997. En ese mes se realizará en esta capital un congreso mundial de educadores, y una de las organizadoras es precisamente la ex lideresa del SNTE. Por coincidencia, la postulación del candidato del PRI a la gubernatura de San Luis Potosí se decidirá tal vez en ese lapso, y uno de los más fuertes aspirantes es precisamente Jiménez Macías, cuya posición resultó fortalecida al perder fuerza la posibilidad de que resultara designado algún otro aspirante sin antecedentes de cargos de representación popular.
La ley es la ley
Algunos dirigentes estatales y figuras prominentes del sector popular, al referirse a la posibilidad de que la ex lideresa magisterial se convierta en titular de la FNOC o CNOP, dijeron que Gordillo tendrá que ``hacer cola''. Es decir, que para dirigir a esa ala del PRI hay otros aspirantes que consideran tener más merecimientos.
Estas diferencias tendrán que definirse de conformidad con los reformados estatutos priístas, los cuales todavía tienen que ser aprobados por el Instituto Federal Electoral (IFE), ya que, según el código en la materia vigente, los partidos tienen que dar aviso a ese organismo de los cambios en sus documentos básicos, para evitar que éstos contradigan alguna de las leyes fundamentales del país.
En realidad se trata de un mero trámite, pues resultaría muy difícil que algún instituto político nacional anunciara en sus documentos básicos propósitos contrarios a los enunciados en la Constitución.
En consecuencia, es casi seguro que las modificaciones a los documentos básicos priístas aprobadas en su 17 Asamblea Nacional serán aceptadas sin ningún contratiempo en la sesión del Consejo General del IFE que se efectuará mañana.
Lo importante para el PRI, y también para quienes están atentos a lo que ocurre en ese partido, es que una vez con la anuencia del IFE se podrá proceder a los cambios en su Comité Ejecutivo Nacional, que forman parte de las reformas aprobadas en su 17 Asamblea Nacional.