La Jornada 8 de octubre de 1996

Se cuadruplicaron los casos de dengue hemorrágico; van 13 muertos en 96

El número de personas enfermas de dengue hemorrágico en los primeros nueve meses de este año se ha cuadruplicado frente a los 52 casos registrados en igual periodo de 1995. En 19 estados del país se ha detectado a 227 individuos con el padecimiento, de los cuales han fallecido 13, informó la Dirección de Epidemiología de la Secretaría de Salud (Ssa).

El incremento de la incidencia del dengue hemorrágico ha ocasionado que estados como Veracruz (con 97 casos) se encuentren en estado de alerta; en tanto que en Nuevo León las autoridades admiten que pese a las campañas de prevención, el virus está ganando la carrera.

Las ciudades más afectadas por el dengue hemorrágico son el puerto de Veracruz y Boca del Río, con 63 enfermos, y en la comunidad de Ojitlán, Oaxaca, han fallecido las cinco personas que manifestaron el padecimiento. Además de Veracruz, los estados con mayor número de enfermos son: Colima, 27 casos; Michoacán, 18; Oaxaca y Tamaulipas, 16 en cada entidad; Morelos, 11, y Tabasco, 10.

El director de Información y Vigilancia Epidemiológica de la Ssa, Cuauhtémoc Ruiz Matus, informó que ante el aumento de los cuadros hemorrágicos, el programa emergente de control y vigilancia del padecimiento --creado el segundo semestre de 1995-- se extendió a 25 entidades y durará todo el año. Dicho plan incluye campañas para evitar la existencia de criaderos del mosco, capacitación de médicos, intensificación de la vigilancia epidemiológica y programas de promoción a la salud.

El dengue clásico y su forma más grave, el dengue hemorrágico, son transmitidos a través del piquete del mosco aedes aegypti, que hace sus criaderos en agua estancada, por lo que en las regiones donde circula el vector (sobre todo en las costas) es conveniente no tener agua rezagada y en caso de requerir almacenar el líquido se recomienda el uso de plaguicidas.

Las probabilidades de que se presenten más casos de dengue hemorrágico en el país se incrementaron en 1995 cuando ingresó a México el serotipo 3 del virus, por lo que ya circulan en el territorio los cuatro tipos existentes, y es mayor el riesgo de que se presente una reinfección.

El dengue clásico se caracteriza por el comienzo repentino de fiebre durante tres a cinco días, dolor de cabeza, falta de apetito, alteraciones del aparato gastrointenstinal y erupción. Y el cuadro hemorrágico se manifiesta con la aparición de granos, hematomas y sangrado nasal y en encías.

En Monterrey, el subsecretario estatal de Salud, Francisco Villarreal, dijo que en Nuevo León en menos de un mes se ha incrementado casi en cien por ciento la incidencia del dengue. A la fecha, son 196 las personas afectadas, de las cuales 48 tienen manifestaciones hemorrágicas.

Admitió que pese a las intensas campañas de prevención, están ganando la carrera los criaderos del mosquito aedes aegypti y expresó su temor que se superen las cifras de 1995 cuando se registraron mil 731 casos de dengue clásico a nivel estatal.

La mayor incidencia se ha presentado en Monterrey, Guadalupe, Juárez, San Nicolás, Cadereyta y Apodaca,y la epidemia actual comenzó en septiembre. (Claudia Herrera Beltrán y David Carrizales, corresponsal)