La Jornada 7 de octubre de 1996

Abstención de 60 a 70% en Guerrero

Oscar Camacho Guzmán, enviado, Chilpancingo, Gro., 6 de octubre Los comicios del otoño guerrerense celebrados este domingo estuvieron marcados por un abstencionismo que fluctuó entre 60 y 70 por ciento del electorado, la ausencia de hechos violentos y el reporte de 225 irregularidades reconocidas por el Consejo Estatal Electoral en sus pantallas electrónicas.

De acuerdo con los reportes recibidos en el Consejo Estatal Electoral, el gobierno cumplió el compromiso de mantener acuartelados a los cerca de 30 mil soldados que tiene en la entidad y sólo estuvieron en la calles elementos de la policía motorizada del estado patrullando y auxiliando en los distritos electorales.

Pero si los elementos de tropa no salieron a las calles, tampoco lo hicieron alrededor de 800 mil ciudadanos guerrerenses --del millón 300 mil registrados en el padrón-- que este día se quedaron en sus casas y le dieron la espalda al proceso electoral, al abstenerse de acudir a las urnas para renovar los 76 ayuntamientos de la entidad, así como los 46 escaños del Congreso local (28 uninominales y 18 de representación proporcional).

Sobre las causas del abstencionismo cada actor político dio su versión: para el PRI la ausencia de la gente en las casillas obedeció a la lluvia que se precipitó en algunas zonas del estado durante el día, en tanto que en la franja de la oposición el abstencionismo se adjudicó a diversas razones, desde el temor a la presencia militar que hace meses hay en la entidad, pasando por el miedo a posibles actos de violencia, hasta la desconfianza tradicional en la limpieza de los procesos electorales.

Los partidos políticos no reportaron hechos de violencia, en tanto que un recorrido por la zona centro de la entidad dejó ver municipios en calma y sin mayor efervescencia cívica.

Por la mañana se conoció sobre la muerte de dos personas en Teloloapan y Altamirano, entre ellos un abogado al que se relacionó con el PRD; pero de inmediato las autoridades electorales rechazaron que se tratara de un acto de violencia electoral; tampoco el PRD ubicó la muerte de esa persona en el contexto de las elecciones.

Guerra verbal en el Consejo Estatal Electoral

Hubo anomalías reportadas por el PRD, PRT y PAN en el Consejo Estatal Electoral que el PRI catalogó sólo como ``incidentes menores'' en algunos casos y ``rumores'' en otros, en tanto que la consejera ciudadana Rosa Icela Ojeda definió a la mayoría de ellas como normales y sólo le dio el rango de grave al ``rasurado'' de un centenar de ciudadanos que no aparecieron en los listados nominales de Tlapa, Quechultenango, Colotlipa, Cuajinicuilapa, Copalillo y Coyuca de Catalán.

Por su parte, el presidente del Consejo Estatal Electoral, Miguel García Maldonado, consideró que las iregularidades fueron de ``carácter menor'' y dijo que las elecciones de este día fueron las más limpias de la historia de Guerrero.

En algunos casos las denuncias de la oposición no tuvieron el respaldo de datos precisos sobre la ubicación de las casillas o los nombres de las pesonas afectadas, mientras que en otros se trató sólo de observaciones rápidas de algún hecho, como la denuncia de un panista que en Acapulco se percató ``cuando pasaba en su coche rumbo a Chilpancingo de que muchas casillas no tenían algo que anuncie que ahí estaban instaladas''.

El desglose de las anomalías dadas a conocer por el Consejo Estatal Electoral indica que en 24 casos hubo instalación de casillas en lugar distinto; personas obstaculizando el proceso en 5 casillas; en otras 6, no llegó papelería; 161 sólo fueron mencionadas como ``otras''; en 3 hubo personas ebrias; propaganda partidista en 15; y en 7, coacción sobre votantes.

En el reporte de anomalías del Consejo Estatal Electoral no se incluyó la denuncia del PRD, PRT y PAN sobre el ``rasurado'' de un centenar de personas de los listados nominales de seis municipios (Tlapa, Quechultenango, Colotlipa, Cuajinicuilapa, Copalillo y Coyuca de Catalán). Tampoco se enlistó el hecho de que no se recibió el reporte de instalación de 161 casillas casillas, de las 3 mil 479 anunciadas para este domingo.

Adicionalmente, y a juicio de los partidos de oposición, en especial del PRD, PRT y PAN, en la jornada electoral de este domingo se mantuvieron viejos vicios y anomalías como la compra de votos, la presión y el proselitismo de funcionarios municipales en favor del PRI, así como la inducción al voto para beneficiar a los candidatos del partido oficial.

Algunos gastos del PRI

El PRI estatal alquiló 24 automóviles último modelo para los días viernes, sábado, domingo y lunes, en 800 pesos diarios cada uno, lo que suma un total de 76 mil 800 pesos para el traslado de legisladores priístas; contrató 28 choferes, mayoritariamente agentes de tránsito, a los que se les pagó mil pesos por los cuatro días, así como otros mil pesos para viáticos, lo que suma 124 mil 800 pesos, cifra que por sí sola representa 12 por ciento del tope de gastos para la campaña en Acapulco.

En otro orden, con motivo de este proceso electoral, el PRI municipal de Acapulco contrató mil 500 promotores del voto que ganaron 100 pesos por cada uno de los 30 días de septiembre, lo que suma 4 millones 500 mil pesos.