Ascendería a 6 mil mdd el crédito ``precautorio'' que se tramita ante el FMI: Ortiz
El ``crédito precautorio'' que contratará el gobierno mexicano con el Fondo Monetario Internacional (FMI) para garantizar el pago del servicio de la deuda externa los próximos tres años asciende a seis mil millones de dólares, informó ayer Guillermo Ortiz Martínez, secretario de Hacienda y Crédito Público.
La víspera, el FMI afirmó en Washington, Estados Unidos, que el nuevo programa económico de tres años que negocia con el gobierno mexicano dará continuidad al crecimiento económico logrado después del plan de ajuste que las autoridades de México pusieron en práctica en marzo de 1995.
Ortiz Martínez rechazó que la contratación de un ``crédito precautorio'' con el FMI sea una signo de insolvencia. ``Es justamente al revés'', declaró el funcionario en una entrevista con el periodista José Gutiérrez Vivó, de la cadena Radio Red.
El secretario consideró que la nueva contratación de deuda con el FMI es necesaria, sobre todo por el bajo nivel de reservas internacionales netas del país, que alcanza apenas unos cuatro mil millones de dólares.
``Siempre conviene tener acceso a ese financiamiento por si hay problemas para conseguirlos; no prevemos que haya problemas, pero los mercados, al saber que están los recursos, se van a sentir más tranquilos'', apuntó Ortiz Martínez.
El gobierno mexicano enfrentará en 1997 vencimientos de deuda externa pública por nueve mil millones de dólares, según datos de la Secretaría de Hacienda. De esa cantidad, cinco mil 500 millones corresponden a créditos revolventes, que se renegocian prácticamente de manera automática.
Ortiz Martínez dijo ayer que los cuatro mil millones restantes son préstamos contratados por las instituciones de banca de desarrollo y organismos como Pemex..
Entre 1998 y 1999 los vencimientos de deuda externa pública suman unos seis mil millones de dólares, que incluyen un pago al gobierno estadunidense por tres mil 500 millones de dólares, que deben liquidarse en 1998, 1999 y el 2000.
Guillermo Ortiz agregó que, aparte de los vencimientos del gobierno federal, el Banco de México tiene que liquidar entre 1998 y 1999 deuda contratada con el Fondo Monetario Internacional por nueve mil millones de dólares.
``Con objeto de tener recursos, y en caso de ser necesarios para poder amortizar esos vencimientos, se ha estado platicando con el FMI un programa llamado precautorio'', añadió el funcionario.
Aunque descartó que el gobierno mexicano pueda enfrentar un nuevo riesgo de insolvencia, como ocurrió en 1995, el titular de Hacienda indicó que el ``préstamo precautorio'' es indispensable ante el bajo nivel de reservas en custodia del Banco de México.
Las obligaciones con el FMI, dijo, las cubre el banco central mediante el uso de las reservas internacionales pero, agregó, el nivel actual de los activos es ``relativamente bajo'', al sumar 15 mil 500 millones de dólares, de los cuales sólo cuatro mil millones de dólares corresponden a reservas netas.
``Estoy seguro que si el país continúa teniendo acceso a los mercados y si las sobretasas que debe pagar el gobierno por las colocaciones de deuda en el exterior continúan disminuyendo no tendremos ningún problema'', confió.