Letra S, 3 de octubre de 1996
El pasado 9 de septiembre, en conferencia de prensa, la coordinadora
general del Conasida, Patricia Uribe Zúñiga, anunció la elaboración de
un Programa nacional para combatir el sida que estará listo a finales
de este año.
En entrevista con LETRA S, la recién nombrada coordinadora de ese organismo adelanta lo que deberá contemplar un programa de esa magnitud.
Ahí dijo, ``delinearemos las políticas preventivas, de atención e investigación, es decir, las políticas con las cuales nos vamos a normar de aquí al año 2000''.
¿Por qué la necesidad de un Programa nacional de sida?
Anteriormente, el Consejo Nacional para la Prevención y Control del Sida (Conasida) contaba con un Programa nacional que estuvo vigente hasta 1994 y posteriormente se establecieron Programas de actividades anuales del Consejo, pero no había un plan donde estuvieran explicitadas las políticas, los objetivos, las estrategias y líneas de acción. Presentaremos este documento antes de que termine el año, es uno de los primeros compromisos asumidos.
Paralelamente, se está formando un grupo técnico interinstitucional del Consejo. Consideramos importante formar este grupo con representación del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS), del Instituto de Seguridad Social al Servicio de los Trabajadores del Estado (ISSSTE), y de todas las instancias involucradas con las decisiones y políticas nacionales para la prevención y control del sida.
Queremos establecer una coordinación mucho más fuerte, con mayor representación institucional, donde, si alguna decisión del programa nacional dice que tenemos que seguir determinada política, todas las instituciones ahí presentes estén totalmente de acuerdo y sea el resultado de un consenso.
A partir del Programa nacional será más fácil decir qué es lo que queremos descentralizar o promover en la descentralización, estableciendo políticas muy claras que se tienen que seguir en todos los estados.
Se van a descentralizar los recursos, pero no las políticas.
Las políticas se están estableciendo desde el nivel central. Cada estado podrá determinar las acciones que llevará a cabo, pero tendrá que ajustarse a las políticas nacionales establecidas. La descentralización es un proceso de la reforma del sector salud en el que se van a descentralizar recursos para que cada estado pueda llevar a acabo sus propios programas. Claro que existe un Programa Nacional de Salud donde están establecidas políticas muy claras, pero en sida aún no hay claridad para los Consejos Estatales de Prevención y Control del Sida (Coesida), sobre cuáles deben ser las políticas que deben seguirse en cada estado y es en lo que tenemos que trabajar de manera acelerada.
Además, este documento va a ser presentado a las organizaciones no gubernamentales (ONG), porque es importante escuchar sus opiniones e integrar sus comentarios antes de que se imprima y salga la versión final.
¿Para implementar este Programa nacional se necesitaría reforzar la capacidad de Conasida?
Creo que aquí lo importante es que exista voluntad política en cada estado para atender este problema, y con la instrucción clara a nivel central de que tienen que abordarlo. Hemos tenido el problema de que en algunos estados no se ha abordado el tema con la intensidad que quisiéramos, que no se han apoyado algunas acciones y estrategias. Debido, en parte, a la carencia de recursos. Y ¿qué es lo que ha pasado? Nos ha pasado con frecuencia que los Coesidas están aislados, no tienen una coordinación real con otras instancias del mismo Sector Salud que están trabajando áreas afines, como la Salud Repoductiva o el área de Epidemiología. Entonces, creemos que fomentando la coordinación a nivel central es más fácil que se dé la coordinación a nivel estatal.
¿El condón va a ser contemplado en el Plan nacional?
Un hecho que ha sido claro, y lo ha expresado el Secretario de Salud, es la promoción del condón como una alternativa de protección. Lo que si se va a ir poco a poco descentralizando y delegando es el abasto de condones; esta función, que se ha sentido como si fuera exclusiva del Consejo, va a cambiar, no podemos seguir manteniendo este abasto, Conasida es una institución fundamentalmente normativa y de asesoría. Lo que estamos tratando de hacer es que cada delegación, cada estado se comprometa a establecer dentro de su programa el apoyo en el abasto de condones. El condón es uno de los métodos de planificación familiar que más se recomienda a los jóvenes, es el método más recomendado en etapas tempranas del inicio de la vida sexual activa. Entonces si se promueve dentro del Programa de Planificación Familiar eso ayudará también en la prevención de enfermedades de transmisión sexual (ETS) y sida. En el Programa vendrán muy claramente expresadas las estrategias, las políticas de prevención sexual, y allí, obviamente, se tiene que incluir el condón.
¿Se han dado pasos concretos en la búsqueda de una salida al problema del acceso a los medicamentos?
En el próximo número del Boletín SIDA/ETS, hacemos una síntesis de las propuestas presentadas sobre ese tema en la XI Conferencia Internacional sobre Sida en Vancouver y a partir de eso vamos a trabajar.
Algunas industrias farmacéuticas están proponiendo reuniones, donde varios países latinoamericanos vamos a compartir experiencias. La primera va a ser en noviembre. Queremos llegar a un consenso a partir de nuestras realidades latinoamericanas para darle solución a ésto; determinar, por ejemplo, qué podrían hacer los gobiernos, y qué parte le corresponde a las industrias.
Hay cosas que se pueden hacer para disminuir los costos, como establecer alguna manera de cancelar o disminuir los impuestos arancelarios en la adquisición de medicamentos.
¿Conasida tiene recursos? ¿La Secretaría de Salud le ha dado suficientes recursos?
Claro que nos gustaría contar con mayores recursos, pero con esta crisis el camino es optimizar lo que ya se tiene, y coordinarse muy bien con otras instituciones. Por ejemplo, tenemos un convencimiento cada vez mayor de la importancia de establecer clínicas de consulta externa especializadas para las personas que viven con VIH/sida.
Estamos convencidos de que la persona afectada sí debe de ser internada como cualquier otro paciente, pero en el primer nivel de atención no conviene enviarlo a consulta general. A ese nivel deberían funcionar clínicas especializadas, como la que existe en el Hospital Gabriel Mancera, donde al paciente se le de un trato mucho más rápido y oportuno. Contrariamente a lo que pudiera pensarse, no se requiere de mucho presupuesto para abrir clínicas especializadas con personal especializado, en cada estado existe personal médico sensibilizado que quiere trabajar, que atiende bien a las personas infectadas o ya con sida y se trata simplemente de detectarlas y concentrarlas en un espacio físico. Esto es optimizar recursos.
Por otro lado, antes se internaba a todos los pacientes y se les mantenía mucho tiempo en hospitales, ahora la tendencia internacional es atenderlos a través de consultas externas especializadas, procurar que el paciente no tenga que internarse. Esto disminuye costos y además mejora la calidad de vida del enfermo, porque en los hospitales es donde están los microorganismos más resistentes a cualquier tipo de antibióticos.
Vamos a seguir luchando todo el tiempo para que se nos proporcione mayor presupuesto, porque mientras más recursos tienes, mayores acciones puedes hacer. Pero ahora me interesa mucho más que se destine presupuesto para cada programa estatal de sida, ya que varios estados no cuentan con ningún presupuesto de este tipo. Creo que ahora hay que darles muchos más recursos a los estados. Y bueno si aumentan los recursos para Conasida, bienvenidos.