La Jornada 2 de octubre de 1996

Los gobiernos deberán demostrar que no toleran actos deshonestos Una Chupacabras se plantó frente a los delegados en Washington

Jim Cason y David Brooks, corresponsales, Washington, 1o. de octubre Los delegados e invitados llegaron a bordo de limusinas, Mercedes Benz y BMW al hotel Washington Sheraton, para asistir a la reunión anual del Fondo Monetario Internacional (FMI) y el Banco Mundial (BM). Lo último que esperaban era ser enfrentados por un Chupacabras de México.

Frente a la entrada para los representantes oficiales, cinco mexicanos de la Asamblea Ciudadana de Deudores de la Banca (ACDB) provocaron tensión entre la seguridad del hotel y la policía, al presentarse con pancartas y consignas contrarias a las políticas impuestas por estas instituciones en México. Uno de ellos, Deudis, la chupacabra, espantaba con una máscara a los muy bien vestidos delegados al encuentro cuando trataban de ingresar al hotel.

Cómo sacarlos del lugar sin provocar un incidente internacional, fue la interrogante de los miembros de seguridad. Suave, pero con firmeza, fueron empujados fuera por algunos agentes, mientras otros trataban de resolver la situación con más calma, ya que estaban presentes la prensa y los fotógrafos.

Otros agentes amenazaban con arrestarlos porque estaban en propiedad privada, pero finalmente un jefe de la seguridad del hotel redujo la tensión y negoció el fin de la protesta y los deudores fueron escoltados hasta la salida.

El esposo de Deudis se encuentra hoy en huelga de hambre frente al Palacio Nacional, en la ciudad de México.

Los cinco integrantes de la agrupación también iniciaron en esta capital una huelga de hambre (este martes cumplieron 52 horas a dieta de agua) en la entrada del hotel Sheraton, sosteniendo la bandera nacional y con cuatro policías cuidándolos, en protesta contra las políticas del FMI y del BM. Permanecerán ahí hasta mañana, cuando se haga la clausura del encuentro.

Gerardo Fernández dice que las políticas del FMI han ``hundido a los países'' en la pobreza, y lo mismo que sucede en México ocurre a nivel internacional. ``No se trata del efecto tequila, es el efecto FMI-BM'', comentó y explicó que están en Washington ``porque las decisiones reales y las políticas (de México) se hacen aquí, son las del FMI y el Banco Mundial''.

Mañana intentarán hacer una ``clausura simbólica'' de la sede del FMI, ``poniendo sellos de clausurado por inhumano'' en las puertas.

Un reportero estadunidense les preguntó cómo aguantaban el ayuno y si se sentían bien. Alfredo Menchaca, quien antes se dedicaba a los bienes raíces en Guadalajara, respondió: ``Los dos gobiernos (Estados Unidos y México) nos han preparado para el hambre''. También aquí esta Gerardo Romo, de Zacatecas, y Evela Lamarque. Todos se toparon con el secretario de Hacienda, Guillermo Ortiz, cuando éste salía ayer del edificio del FMI y, según los activistas, Ortiz accedió a encontrarse con ellos en estos días para ``dialogar'' sobre estos problemas.