Aprueba el Senado de EU dejar sin ayuda federal a indocumentados
Reuter, Ap, Afp y Efe, Washington, 29 de septiembre El presidente Bill Clinton firmó esta noche la ley de presupuesto horas después de que fue aprobada por el Senado. La iniciativa fue sancionada el sábado por la Cámara de Representantes, luego de que la Casa Blanca demócrata y el Congreso repu-blicano llegaron un acuerdo sobre el proyecto de ley de inmigración, sancionado también este lunes por la Cámara alta.
Clinton firmó la ley de presupuesto antes de esta medianoche para evitar un cierre parcial del gobierno, ya que el año fiscal 1997 inicia este primero de octubre.
La disputa que mantenían Clinton y los demócratas con los republicanos por medidas previstas en la ley de inmigración, complicó la negociación sobre el presupuesto, ya que algunas disposiciones económicas del proyecto antinmigratorio estaban en el presupuestario.
El presupuesto para el año fiscal 1997 incluye seis proyectos de gastos que normalmente habrían sido considerados por separado, y el proyecto de ley sobre inmigración.
El presupuesto fue aprobado hoy en el Senado por 84 votos contra 16, y en la Cámara de Representantes fue sancionada por 370 contra 37 votos.
El proyecto de presupuesto asigna 356 mil millones de dólares a los programas nacionales y 244 mil millones al sector militar. Clinton logró conseguir 6 mil 500 millo-nes adicionales para programas internos, de los cuales 4 mil millones se destinarán a programas de educación.
Los republicanos se negaron durante meses a otorgar el dinero adicional, pero al final muchos legisladores trataron de terminar el trabajo para regresar a sus estados y emprender las campañas de elección con miras a los comicios generales del 5 de noviembre.
Luego de que los senadores demócratas dieron su respaldo al proyecto de ley de inmigración, el congresista republicano Charles Grassley, dijo: ``la iniciativa nos dará mayor influencia en la inmigración ilegal. Todo aquel que no respalde este proyecto simplemente no ve con seriedad la estrategia de cómo contrarrestar la inmigración ilegal''.
Después de que Clinton exigió modificaciones en un proyecto previo, republicanos y demócratas convinieron el pasado fin de semana incrementar las sanciones a contrabandistas de ilegales y a los falsificadores de documentos de identidad que muchos inmigrantes utilizan para conseguir empleo en Estados Unidos.
El acuerdo alcanzado establece los beneficios que podrán recibir los inmigrantes legales, pero deja a los indocumentados sin ayuda federal y dispone que los inmigrantes ilegales queden sujetos a graves sanciones y a un proceso de deportación más acelerado, mientras los funcionarios del sistema de bienestar social (welfare) podrán investigar el estado legal de los inmigrantes antes de autorizar que se les conceda ayuda pública.
Los indocumentados no podrán ya aspirar a los beneficios del welfare y se permitirá a los estados negarles la licencia de manejo. Sin embargo, los inmigrantes contagiados de sida recibirán tratamiento médico costeado por el gobierno federal, para proteger la salud pública, medida que se aprobó ante la insistencia de la Casa Blanca.
Los republicanos aceptaron suavizar la medida que obligaba a que los residentes legales tuvieran un ingreso superior a 200 por ciento del límite de la pobreza en Estados Unidos para patrocinar el ingreso de sus familiares extranjeros al país como inmigrantes. El ingreso mínimo fue fijado en 125 por ciento del nivel de pobreza, 100 por ciento más de lo que requería la ley.
En las intensas negociaciones, republicanos y demócratas acordaron limitar la pérdida de beneficios sociales que sufrirán los inmigrantes legales tras recibir durante un año asistencia pública costeada por el Estado y los contribuyentes estadunidenses.
Mientras, el último sondeo de USA Today/CNN sobre intenciones de votos con miras a las elecciones, señaló que Clinton cuenta con 56 por ciento de apoyo, contra 34 por ciento para Bob Dole, y 5 por ciento para el multimillonario texano Ross Perot.
Soros donará 50 mdd a inmigrantes
El multimillonario de origen húngaro y nacionalizado estadunidense George Soros anunció que donará 50 millones de dólares para financiar los costos judiciales y otros de inmigrantes legales en Estados Unidos, que, dijo, son ``atacados''.
Al referirse a la reforma al welfare que niega ciertos programas federales de ayuda a los inmigrantes legales, Soros dijo que ``como resultado de la nueva ley, al menos un millón de inmigrantes están a punto de perder sus beneficios'', y destacó que los inmigrantes legales pagan impuestos y pueden ser llamados a servicio militar activo.
``La estatua de la Libertad acoge a todos los que aspiran a respirar con libertad, pero el perverso ataque contra los inmigrantes amenaza con ahogarlos'', indicó y añadió: ``Como un inmigrante y ciudadano estadunidense naturalizado, tengo profunda simpatía por aquellos que vienen a este país buscando una vida mejor... Estoy consternado por las recientes acciones del Congreso para negar asistencia pública a los no ciudadanos que residen legalmente en este país''.
Recordó que cuando vivió en Gran Bretaña, donde trabajó como guardián ferroviario, se fracturó una pierna. Sin tener acceso al sistema de beneficios de salud británico, ``no me hubiera podido mejorar'', indicó.