Fiscalizarían EU y México depósitos bancarios de más de 10 mil dólares
Ap y Notimex, Washington, 30 de septiembre El secretario de Hacienda de México, Guillermo Ortiz, sostuvo que no hay condiciones ni elementos para que se dé una nueva devaluación del peso, cuya cotización oscila libremente en el mercado. Cualquier especulación ``responde al cálculo de los interesados'', precisó.
Al ser entrevistado en el marco de los trabajos de la reunión conjunta del Fondo Monetario Internacional y del Banco Mundial, Ortiz dijo que el sistema financiero de México ``se está reforzando con capital y medidas de organización interna y no he escuchado a nadie, aquí, que exprese dudas sobre la solidez de nuestro programa''.
En Montreal, Canadá, se difundió un informe acerca de la eventual devaluación del peso mexicano, y sobre el particular Guillermo Ortiz subrayó que dichas versiones carecen de fundamento.
Por otra parte, el funcionario mexicano se entrevistó con el secretario estadunidense del Tesoro, Robert Rubin, con el que abordó el tema de la cooperación bilateral para combatir el lavado de dinero.
En el encuentro se analizó también la situación general de la economía mexicana y se estableció que el sistema de libre flotación mantiene al peso en niveles adecuados.
Un funcionario de la Secretaría de Hacienda precisó que Ortiz y Rubin exploraron nuevos programas de cooperación para combatir el blanqueo de dinero, en particular de las operaciones sospechosas. La cooperación México-Estados Unidos para la detección de esas prácticas ilícitas es un mecanismo bilateral que será establecido a partir de julio de 1997 y enfocado a los depósitos bancarios de grandes sumas.
Un funcionario del Tesoro estadunidense manifestó que se trataría de depósitos superiores a los 10 mil dólares. Es decir, habrá un sistema computarizado por medio del cual ambos países podrán intercambiar información para las investigaciones pertinentes sobre transferencias.
Aprueba el FMI nueva guía mundial de buena gestión económica
Reuter, Afp, Ap y Ansa, Washington El FMI adoptó una guía mundial de buena gestión económica en once puntos, entre los que destacan la disciplina fiscal, reformas estructurales de los mercados de trabajo, así como el combate a la corrupción y garantizar la solidez de los sistemas bancarios a través de una fuerte regulación.
El director-gerente del organismo, Michel Camdessus, ``bautizó'' la declaración ampliada como ``los once nuevos mandamientos para el buen manejo de las economías'', aunque se apresuró a aclarar que no es nada ``caído del cielo'' sino enseñanzas ``destiladas de la realidad'', producto de la experiencia acumulada en los tratos con sus 181 países miembros.