Luchan ahora los tepoztecos para elegir gobernantes según su tradición
Francisco Guerrero Garro, corresponsal, Tepoztlán, Mor., 23 de agosto Hace un año los tepoztecos organizados en torno al Comité de Unidad de Tepoztlán (CUT) comenzaron su lucha para impedir la realización de un megaproyecto turístico avalado por las autoridades estatales, y después de conseguirlo su movilización pugna ahora por recobrar la tradición de elegir a sus gobernantes según usos y costumbres propios.
Como resultado de la presión de diversos sectores internos y externos, el Grupo KS, promotor del complejo que incluía un club de golf, ha retirado su pretensión de construirlo, aunque sólo verbalmente y no de manera oficial.
En tanto, la población de Tepoztlán reclama el derecho de elegir a sus autoridades y exige la liberación de tres de sus dirigentes presos, castigo al asesino del simpatizante Marcos Olmedo y la anulación de más de cien órdenes de arresto en contra de personas que participaron en las movilizaciones durante este periodo.
En las últimas tres décadas dos veces se intentó poner en marcha la construcción de lo que sería el club de golf El Tepozteco, la más reciente a finales de los años sesenta, y en ambos casos la comunidad frustró el proyecto.
Sin embargo, los dueños de las 187 hectáreas que anteriormente formaron parte de la dotación de bienes comunales de Tepoztlán, los integrantes del Grupo KS, echaron a andar una vez más el proyecto hace unos dos años, pero esta vez prepararon todo sigilosamente.
Mediante gestiones secretas obtuvieron la documentación y los permisos necesarios para comenzar la obra, y una vez que estos trámites estuvieron listos, comenzaron a buscar el respaldo de sectores y autoridades cuya afinidad requerían. Establecieron contacto con el presidente municipal de Tepoztlán, el priísta Alejandro Barragán Morales, y con los cinco regidores de la misma filiación que le eran incondicionales, excluyendo de la información a los dos regidores del Partido de la Revolución Democrática.
El 19 de marzo de 1995 Barragán Morales intentó que el cabildo, en una ``reunión al vapor'', aprobara los permisos de construcción para que KS empezara sus trabajos, pero al correrse la voz entre los habitantes cientos de ellos se congregagaron frente a la presidencia municipal y obligaron al cabildo a negar el permiso.
Sin embargo, este trámite se cumplió más tarde, probablemente a finales de abril, en una junta del ayuntamiento que se mantuvo en reserva, por lo que sólo faltaban las aprobaciones de la Secretaría de Medio Ambiente, Recursos Naturales y Pesca (Semarnap) y del Instituto Nacional de Ecología (INE).
Cuando esta situación trasciendió, el 6 de agosto del mismo año se formó como respuesta el Comité Nacional para la Defensa de las Tierras Tepoztecas (CNDTT), convocado entre otras organizaciones por el Grupo de los Cien, el grupo Taller Espacio Verde, el Pacto de Grupos Ecológicos y el Colectivo Ecologista de Jalisco, que se propusieron impedir la construcción del club de golf El Tepozteco mediante el argumento de que alteraría gravemente el entorno ecológico de Tepoztlán.
Miles de tepoztecos y habitantes venidos de Yautepec, Xoxocotla, Tejalpa y Milpa Alta, además de organizaciones como la Comisión Independiente de los Derechos Humanos de Morelos, el PRD y el PRT, se congregaron en la plaza principal de Tepoztlán para apoyar a la nueva organización.
En tanto, KS continuaba sus gestiones finales y el 19 de agosto el INE aprobó el proyecto, ya avalado por la Semarnap y el gobierno de la entidad. Por primera vez el edil Alejandro Barragán aceptó públicamente que su administración había otorgado los permisos para que se iniciaran las obras.
Confiado en su éxito, el grupo empresarial realizó en la capital morelense una espectacular presentación de su proyecto, en el Hotel Camino Real, a donde asistieron el gobernador de la entidad, Jorge Carrillo Olea, y el obispo de Cuernavaca, Luis Reynoso Cervantes, quien calificó el proyecto de "regalo de Dios que cae del cielo a Tepoztlán".
El grupo KS precisó entonces sus planes de edificar un club de golf, un hotel de cinco estrellas, un parque industrial para alta tecnología, en donde la compañía de telecomunicaciones estadunidense GTE sería la primera en establecerse, y un fraccionamiento con 800 residencias de lujo.
Respecto a las protestas por un posible impacto ecológico negativo en la región, los promotores aseguraron que un estudio aprobado por las autoridades del ramo descartaba el riesgo. Precisaron que la perforación de dos pozos no afectaría los mantos freáticos de Tepoztlán, que se reforestaría la zona y se crearían empleos para los tepoztecos.
Surge el CUT
La reacción popular se intensificó en Tepoztlán y el 20 de agosto los opositores al proyecto convocaron a una asamblea que se reunió frente al palacio municipal, con la asistencia de unas 2 mil 500 personas que acuerdaron mantener su rechazo al proyecto de KS y desconocer las autorizaciones del alcalde y sus regidores.
Finalmente, los participantes en esta asamblea ocuparon la presidencia municipal el 24 de agosto y desconocieron a Alejandro Morales Barragán como presidente municipal. Las oficinas municipales fueron selladas y se instaló un plantón permanente frente al edificio.
El ambiente se tensó aún más cuando el gobierno estatal comienzó a rodear Tepoztlán con policías preventivos y judiciales, mientras los tepoztecos instalaron barricadas en los accesos a la población y organizaron guardias de defensa.
Fue en este punto del conflicto cuando se conformó el Comité de Unidad de Tepoztlán (CUT), con militantes del PRI, PAN y PRD, integrantes del comisariado de bienes ejidales, maestros, comerciantes y taxistas del lugar, así como artistas e intelectuales avecindados en Tepoztlán.
Fue la confluencia de estos diversos sectores, algunos incluso con militancia antagonista, la que consiguió que hasta el momento se encuentre detenido, al parecer definitivamente, el proyecto del complejo turístico impulsado por el Grupo KS y respaldado en su momento por las autoridades estatales y municipales, quienes lo justificaron como una oportunidad de desarrollo para la comunidad.
Este movimiento ha logrado aglutinar la adhesión de diferentes sectores del país e incluso simpatías internacionales, en especial de grupos ecologistas.
También han llegado a esta comunidad a manifestar su solidaridad personajes como Ofelia Medina, caricaturistas como Rius y El Fisgón, escritores como Carlos Monsiváis, políticos como Cuauhtémoc Cárdenas, Heberto Castillo y Porfirio Muñoz Ledo. Los tepoztecos en lucha también han recibido el respaldo del Frente Zapatista de Liberación Nacional.