79% de argentinos, contra el paquetazo

Ap, Ansa, Efe y Reuter, Buenos Aires, 18 de agosto La mayoría de los argentinos considera que el severo ajuste fiscal anunciado la semana pasada empeorará la situación del país, según un sondeo divulgado hoy por la prensa en momentos en que el ministro de Economía, Roque Fernández, se encuentra con inesperadas dificultades en el Congreso para aprobar el paquete de medidas.

Pero el presidente Carlos Menem aseguró que "el reclamo de la gente no es tan intenso como dicen, porque los medios (de prensa) pueden decir una cosa, pero al momento de las conclusiones, como en las últimas elecciones presidenciales (mayo de 1995), nos dieron a favor con un 54 por ciento (en realidad un 49.9 por ciento)".

Durante una conferencia de prensa en la balnearia localidad de Chapadmalal, a 400 kilómetros de Buenos Aires, Menem trazó esta noche un panorama optimista sobre la marcha de la economía, al afirmar que están bajando los índices de desempleo, pobreza y mortalidad infantil, y que el Producto Interno Bruto (PIB), crecerá este año ``como mínimo'' un cinco por ciento.

Sobre la posibilidad de más protestas laborales, el mandatario peronista destacó: "podrán hacer todos los paros que quieran, pero la transformación económica va a continuar``, y advirtió: ''no vamos a tolerar cualquier tipo de violencia".

Según un sondeo publicado hoy por el diario La Nación, 61 por ciento de los argentinos considera que las nuevas medidas económicas --que incluyen el aumento de los impuestos y la eliminación de subsidios-- ``perjudicarán'' la situación económica, mientras que un 18 por ciento dice que no ayudarán a mejorarla.

Sólo un 13 por ciento de los encuestados en la ciudad y provincia de Buenos Aires consideraron que contribuirán a mejorar la economía. El sondeo reveló también que para un 47 por ciento, el cambio del ministro de Economía ``empeorará'' la situación económica, contra 30 por ciento que afirma que ``todo seguirá igual'', y 13 por ciento que opinaron que mejorará.

Pero además, trascendieron los resultados de otra encuesta según la cual una abrumadora mayoría de 86 por ciento de los argentinos califica como ``mala" o "muy mala'' la política del gobierno para atacar el creciente desempleo y la pobreza.

"Los datos revelan uno de los peores momentos de la imagen gubernamental", señaló una encuestadora, autora del trabajo que, según el diario Clarín, causó gran preocupación entre las autoridades.

El ajuste lanzado por Fernández, quien sustituyó a Domingo Cavallo a fines de julio, tiene como objetivo disminuir un déficit fiscal calculado en unos 6 mil 500 millones de dólares para 1996, el doble de lo pactado con el Fondo Monetario Internacional.

Menem admitió hoy que hubo una diferencia de ``interpretación'' entre Fernández y Cavallo en torno al déficit, pues el segundo lo calculó en sólo 3 mil 500 millones de dólares, "pero vamos a esperar hasta fin de año para ver cuáles son los números verdaderos", dijo el presidente.

Las medidas generaron una reacción desfavorable incluso entre empresarios entusiastas con el actual modelo económico y en la oficialista Confederación General del Trabajo (CGT), la mayor central sindical del país, que estudia la convocatoria de una huelga nacional de 36 horas acompañada de una movilización.

Erman González, diputado del gobernante Partido Justicialista --con mayoría parlamentaria-- y otrora estrechamente ligado a Menem, mencionó hoy la posibilidad de ``demorar'' la aprobación de las medidas del llamado paquetazo económico, porque, dijo, "habrá que estudiar muy bien sus fundamentos".

Un sector de legisladores oficialistas pide que Fernández elimine su propuesta de elevar la edad de jubilación de las mujeres de 60 a 65 años, equiparándola con la edad de retiro de los hombres, mientras varios gobernadores provinciales peronistas demandan compartir los beneficios de los incrementos impositivos.

Las medidas anunciadas por Fernández afectan principalmente a la ya castigada clase media argentina, especialmente por el aumento del 46 por ciento del gasoil, combustible utilizado por casi todo el transporte de carga y de pasajeros.