La Jornada 12 de agosto de 1996

Vigilancia, control y castigo, plantea a maestros nuevo libro oficial

Rosa Elvira Vargas En la colección Así educa Guanajuato, un libro dirigido a docentes en servicio, se expone: ``El verdadero maestro al ejercer autoridad, no busca sólo dominar, sino servir y ayudar a crecer a los demás''. ``Una buena palabra es más eficaz que una buena razón''.``Porque el hombre es persona, no pertenece más que a sí mismo y a su creador; no puede pertenecer a otro hombre, ni nadie puede considerarlo como cosa''. ``Castigar no sólo es un deber, sino que sobre todo, es a menudo un deber penoso, al que no tiene derecho a sustraerse''.

Con un tiraje de 50 mil ejemplares y con primera edición en 1995, el libro Así guía, de esa colección, fue elaborado por el gobierno panista de Guanajuato. En la presentación se indica que ``un grupo de entusiastas maestros'' lo hicieron para enriquecer las aspiraciones e ideales educativos y --dirigiéndose al profesor-- para ser ``un medio que desarrolle tu sentido de liderazgo y creatividad profesional''.

Con un epígrafe de Karol Wojtila --Juan Pablo II-- inicia el libro: ``El mejor método de educación es el amor a tus alumnos, tu autoridad moral, los valores que encarnas''.

Al final se subraya que las ideas plasmadas en el libro fueron tomadas de otros dos: La autoridad del maestro, de José Manuel Velazco Arzac, Alianza de Maestros y Normal Benavente, y El arte de dirigir, de Gastón Courtis. Ambos son la base para una amplia fraseología tomada por el gobierno de Guanajuato para hacer el libro, en el que se consideran los siguientes capítulos: El principio de autoridad; La misión del maestro; Cualidades del que guía; El arte de dirigir; El maestro: educador; El arte del magisterio y un apéndice.

Asimismo, ocho profesores aparecen como colaboradores: Guadalupe Domínguez Pérez de Lara, Ana Bertha Vargas Ramírez, Hilda Margarita Serrano; Teresa Paulina San Germán, Tomás Peralez López, Rosa Martha Rangel Pantoja, Rosa Elvira Izaguirre y María Elena Carrillo Razo. No se especifica, sin embargo, si ellos están en activo o cuál es su especialidad pedagógica.

Del glosario de términos, dos ejemplos: ``Control: prevenir las faltas mediante una activa vigilancia. Colocar a los alumnos de suerte que tengan las menos ocasiones posibles de trastornar el orden: poner cerca del lugar del maestro a los más traviesos; evitar juntar un grande con un chico, o dos inquietos uno al lado del otro, en especial si se hallan lejos del maestro''. ``Dignidad: mantener un trato cordial entre todos los alumnos sin familiarizarse particularmente con ninguno''.

En La misión del maestro destacan definiciones como las siguientes: ``Al verdadero maestro se le reconoce porque su sola presencia es para los seres que él dirige, un estímulo para excederse a sí mismo en servicio del bien común''. ``Cuando falta el jefe manda la anarquía, y la anarquía no es buena, más que para destruir''. ``Maestro, director, supervisor: en ocasiones será necesario sacrificarse, pero hay que trabajar con ánimo y lealtad por la educación en Guanajuato''. ``Maestro: tu ejemplo legitima y exige obediencia, no ciega, pero sí consciente y libre''.

En la reproducción de las frases de Así guía se ha respetado la sintaxis con que las mismas aparecen en el libro. Enseguida, algunas de las que forman parte del capítulo Cualidades del guía: ``El bien común, marca exactamente los límites de la autoridad; pero a la vez le da fuerza''. ``La acción en común, exige sacrificios, disciplina y adhesión voluntaria, por eso debe de ser hecha con fe, con entusiasmo y con una gran mística''. ``Todo lo que vive alienta, lo que no alienta está muerto''.

Y las que siguen están contenidas en el capítulo El maestro: educador: ``Muchos hombres sienten la instintiva necesidad de apoyarse en otro que lo supera, cuando no tienen quién les comprenda y anime se vuelven vacilantes e inseguros, el jefe debe de ser apoyo, fuerza y seguridad''. ``En toda sociedad hay tantos elementos de discordia como socios; si la causa del bien común o de la misión que hay que cumplir en orden a dicho bien no la toma por su cuenta un jefe responsable, pronto los conflictos, la falta de inteligencia y la apatía general habrán logrado disgregarlo todo''.

El arte del magisterio, capítulo con el que cierra el libro, contiene conceptos como los siguientes: ``El reproche del jefe verdadero no es ducha que enfría sino soplo que anima al ardor''. ``Jamás castiguemos en un momento de irritación: generalmente aguardemos al siguiente día para fijar el castigo''. ``El equipo es un grupo de hombres reunidos por un lazo orgánico, es decir, para el servicio de una obra o de causa común, a la que aportan igual entusiasmo y se reparten el esfuerzo requerido en proporción de los dones, habilidades o medios, sin preocupación de competencias, rivalidades o intrigas, asociados por el resultado de conjunto, no por el éxito de tal o cual particular. Esta es la fórmula de todas las grandes obras que han producido las civilizaciones humanas''.

Y en el Secreto del éxito: ``El olvido de sí, la abnegación, el amor al prójimo son, tanto en los jefes como en los colaboradores, la base del éxito en la misión''.