Al IMSS, trabajadores de la economía informal
Roberto Garduño E. En los próximos cinco años el Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) ampliará la cobertura de la seguridad social con la incorporación de los trabajadores de la economía informal y aquellos miles de asalariados que aún permanecen fuera del sistema.
El documento Lineamientos estratégicos 1996-2000 que dio a conocer el director del instituto, Genaro Borrego, destaca que con la entrada en vigor de la nueva Ley del Seguro Social para el próximo 1o. de enero de 1997, se facilitará la inclusión de las familias que no reciben atención médica en todo el país.
Aparte, cuatro son las estrategias que el Seguro Social practicará hasta el año 2000: desarrollar formas de servicio adecuadas a las cambiantes necesidades sociales; hacer congruente la toma de decisiones con la operación institucional para la satisfacción oportuna de la demanda; transformación institucional para la modernización y la contención de costos, y la inserción del instituto en las prácticas de nuevo federalismo.
Los Lineamientos estratégicos 1996-2000 aceptan que "la más dramática señal de la necesidad de corregir el rumbo es el estancamiento de la cobertura del IMSS durante los noventa. La nueva Ley del Seguro Social tiene como objetivo primordial ampliar su cobertura, ya que de poco servirían las estrategias de mejorar los servicios y de promover el ahorro entre los asegurados, si cada vez es menor la proporción de mexicanos cubierta por la seguridad social".
Por ello, señala el documento, en el contexto de la transición epidemiológica --que se caracteriza por la reducción en la proporción de muertes causadas por enfermedades transmisibles y el aumento atribuible a los padecimientos crónico-degenera-
tivos--, los retos de la seguridad social se superarán con la atención a los riesgos de trabajo, los servicios y prestaciones para el trabajador jubilado e incapacitado, los servicios de desarrollo social y económico de la mujer, y la atención a las adicciones.
También propone una ``alianza del Estado con los trabajadores'', que define en cinco principios. Garantizar un nivel de vida digno a los trabajadores después de que se retiran de sus ocupaciones laborales; proveer al trabajador de una red de protección integral a la salud y contra gastos médicos.
Facilitar el desempeño de las mujeres en el mercado de trabajo para lograr condiciones objetivas de igualdad de oportunidades, y obtener condiciones de trabajo seguras e higiénicas.
Para este año, el IMSS proyecta, señala el documento, alcanzar la eficiencia operativa y mejorar la calidad de los servicios sobre todo de primer nivel, que es el que despierta mayor inconformidad, y cumplir los compromisos que se derivan de la puesta en marcha de la nueva ley.
Por otra parte, Armando Araujo Montaño, presidente de la Concanaco, al participar en la Asamblea General del instituto, hizo un reconocimiento a los trabajadores del IMSS por "su vocación de servicio``; sin embargo, también pidió su "comprensión'' en torno a la demanda de un aumento salarial de emergencia que hizo el Sindicato Nacional de Trabajadores del Seguro Social (SNTSS):
"Hacemos un serio llamado a la dirigencia del SNTSS para que reconsidere sus planteamientos adoptados en relación a la solicitud de incremento salarial, adicional a la revisión contractual de octubre".
Un día después de celebrada dicha asamblea, la oficina de prensa del IMSS dio a conocer los mensajes pronunciados por Araujo Montaño y el representante obrero, Alfonso Sánchez Madariaga, quien también externó su postura en torno a la situación laboral en el instituto.
"No es válido confundir legítimas aspiraciones salariales que legal y contractualmente tienen su tiempo, con desborde de presiones desestabilizadoras que pongan en peligro la vida y la atención médica de más de 35 millones de derechohabientes y al propio instituto, que aún no escapa de los propósitos de quienes ambicionan privatizarlo o destruirlo".