La Jornada 9 de agosto de 1996

Circulan en el DF un millón 116 mil vehículos de alta contaminación

Víctor Ballinas y Alonso Urrutia En la ciudad de México circulan diariamente un millón 116 mil 162 vehículos altamente contaminantes de modelos anteriores a 1985, cuyo retiro de circulación es premisa para el combate a la infición. Datos de la Secretaría del Medio Ambiente del gobierno capitalino dan cuenta de que un vehículo anterior a 1985 contamina 69 veces mas que un modelo de 1992 en adelante.

El director general de Proyectos Ambientales de la dependencia, Sergio Sánchez, señaló que el 60 por ciento de los vehículos que circulan en la Zona Metropolitana de la Ciudad de México son antiguos y requieren salir de la circulación.

En tanto, durante la presentación de un programa de reciclamiento vehicular en la Asamblea de Representantes del Distrito Federal (ARDF), el promotor privado Jack Kahan dijo que la obsolescencia del parque vehicular en esta metrópoli se ha acentuado por la recesión y por la ausencia de programas que incentiven el retiro de vehículos obsoletos. En la actualidad la edad promedio de los automóviles en la ciudad es de 8 años, añadió.

Los datos del director general de Proyectos Ambientales del Departamento del Distrito Federal señalan que el 25 por ciento de los vehículos genera más del 60 por ciento de contaminantes en la metrópoli.

Las innovaciones tecnológicas introducidas por las empresas automotrices en los últimos años han reducido los niveles de generación de contaminantes en los vehículos de modelos recientes, sobre todo a partir de 1986; sin embargo, son los vehículos 1992 en adelante con lo que emiten el menor porcentaje de contaminación.

Sin embargo, los datos gubernamentales establecen el riesgo ambiental que representa la circulación de unidades de modelos anteriores a 1985 que circulaban con carburador mecánico y electrónico; por ende, en la actualidad generan 69 veces más contaminación. En la actualidad, éstos representan el 48.5 por ciento del parque vehicular de la ciudad de México, arrojando en promedio 2 mil 144 toneladas de contaminantes.

En tanto, los modelos de 1986-1990, que tienen un sistema de inyección de combustible generan diariamente 594 toneladas de contaminantes, representando el 20.5 por ciento del parque. Hacia 1991 y hasta 1994 se introduce el convertidor catalítico, por lo que estos modelos, pese a representar el 23 por ciento del parque, generan sólo 496 toneladas de contaminantes. Finalmente, el 7.8 por ciento de vehículos modelos 1995 y 1996, sólo generan 134 toneladas diarias de contaminantes.

Sánchez indicó que se analizan las diversas opciones, porque este programa de sustitución del parque vehicular viejo opera en Estados Unidos, en Francia, Japón , Alemania, Italia y Holando, y ha dado buenos resultados. Actualmente, indicó el funcionario, se hace un análisis económico y fiscal para conocer cuál es el costo de las diferentes opciones que se tienen. Los programas que se han puesto en marcha en otros países incluyen el retiro de vehículos altamente contaminantes que son adquiridos por las grandes empresas que desean expandirse, y para que los gobiernos les permitan hacerlo retiran de la circulación un número determinado de autos, equivalente a la cantidad de emisiones contaminantes que ellos podrían provocar al medio ambiente.

Otros programas , explicó Sánchez, hablan de que los gobiernos adquieren vehículos altamente contaminantes y los destruyen; esas unidades las adquieren con donativos de grandes empresas; otras formas de controlar las emisiones contaminantes son producir un número determinado de placas de circulación, y otro que las armadoras, distribudoras y el gobierno otorguen estímulos fiscales y bonos para adquirir vehículos chatarra.

En la sede de la Asamblea de Representantes del Distrito Federal, Jack Kahan presento un proyecto de reciclamiento vehicular basado en una empresa que promoviera una subasta masiva de vehículos con el objetivo de retirar las carcachas de circulación.

Según las proyecciones, se buscaría redistribuir en el primer año a cien mil unidades vehiculares hacia zonas menos contaminadas; otras 20 mil serían retiradas de la circulación y otras 20 mil exportadas a Centro y Sudámerica.