Oro para el español Miguel Induráin en la prueba contrarreloj; el mexicano Zárate, trigésimo

Rosalía A. Villanueva, enviada Atlanta, 3 de agosto Mientras el español Miguel Induráin, pentacampeón de la Tour de Francia, se cubría de la gloria olímpica al ganar la medalla de oro, la que ``cambiaría'' por el sexto título de la prueba francesa, el mexicano Jesús Zárate se dolía de haber terminado la competencia de 52 kilómetros contrarreloj individual en el sitio 30. No encontraba pretexto. Ni lo buscó.

Finalmente, el navarro Induráin consiguió hacerse de la presea olímpica con un tiempo de 1:04.05 horas, 12 centésimas menos que su compatriota Abraham Olano y 21 antes del británico Chris Boardman, en la final del kilómetro contrarreloj. Lo que llamó la atención en el cuarto heat eliminatorio, corrido bajo la lluvia, fue la protección especial de la que gozó el español, quien además de su vehículo de guía, llevaba otros dos autos y sendas motocicletas.

La diferencia entre la medalla de oro y el sitio logrado por Zárate, fue de 7.37 minutos sobre un recorrido total de 52.2 kilómetros, sumado luego de cuatro vueltas al trazado que sirvió hace unos días para la ruta olímpica en la zona de Buckhead, con la vigilancia permanente de cinco helicópteros.

Con la cara enrojecida por el esfuerzo realizado y sentado en el asfalto, apoyada la espalda en la llanta de una pick-up, Jesús Zárate apenas podía controlar las palabras. Respiraba agitadamente y el sudor caía en todo el cuerpo. Su competencia inició a las 8:31.30 horas, detrás del polaco Tomasz Brozyna y 4.5 minutos antes que el alemán Michael Rich, quien al paso del tiempo lo rebasó, situación que causó un serio revés en el estado de ánimo del pedalista y en su rendimiento.

Dijo que se sintió bien durante el recorrido, aunque su estado de ánimo no correspondía a sus palabras. Aseguró que dio todo lo que estaba de su parte, hasta que ya no pudo. ``Si hubiera podido dar más allá, creeme que lo hubiera hecho y las cosas hubieran sido diferentes'', comentó.

Recordó que fue en las últimas vueltas, en las que por lo regular siempre se decide todo, cuando se dio cuenta de que una motocicleta le daba alcance, por lo que de inmediato pensó que se trataba de la guardia del ciclista brasileño Valdir Lermer, quien había partido apenas 1.5 minutos más tarde. ``Cuál sería mi sorpresa que se trataba del pedalista alemán, quien había salido bastante tiempo después'', señaló, por lo que allí mismo dejó terminada su moral y sus ganas de seguir compitiendo. Zárate finalizó con un tiempo de 1:11.42 horas.

El ciclista reflexionó sobre lo que puede ser el futuro, como el encontrar varios patrocinadores que les puedan mantener a los pedalistas nacionales giras al extranjero, sobre todo a Europa, ya que de otra forma no se podrá competir con buenos resultados fuera del país.

Por ello, previsor, habló que si para Sydney se quieren lograr buenos resultados desde ya se les debe apoyar a los jóvenes, de los cuales hay muchos. De todas formas dijo que su resultado había sido bueno si se toma en cuenta que sólo un pedalista colombiano y un guatemalteco estuvieron por encima de su posición, y más si se considera que en la competencia hubo muchos profesionales.

Negó totalmente que la tecnología de su bicicleta fuera un factor determinante en el resultado de la prueba, e incluso puso como ejemplo el caso de Induráin, cuando ganó el primer lugar en los Campeonatos Mundiales de Colombia, con un vehículo muy convencional. ``Finalmente lo que importa es la capacidad del corredor'', indicó.

En la competencia femenil, la rusa Zulfiya Zabirova recorrió los 26 kilómetros en 36.40 minutos y relegó a la francesa Jeannie Longo, campeona de la prueba de ruta, al segundo lugar.

52 km contrarreloj, hombres

Oro: Miguel Induráin, España, 1:04.05 horas

Plata: Abraham Olano, España, 1:04.17

Bronce: Chris Boardman, Gran Bretaña, 1:04.36

Contrarreloj femenil, 26 kilómetros

Oro: Zulfiya Zabirova, Rusia, 36.40 minutos

Plata: Jeannie Longo, Francia, 37.00

Bronce: Clara Hughes, Canadá, 37.53