Zedillo: decisión inquebrantable, aplicar la ley en cualquier caso de corrupción
Rosa Elvira Vargas, enviada, y David Carrizales, corresponsal, Monterrey, NL, 5 de julio El gobierno tiene la decisión firme, inquebrantable y a prueba de toda circunstancia, de aplicar la ley en cualquier caso de corrupción, aseguró el presidente Ernesto Zedillo, y dijo que no hay ejemplo reciente de alguna denuncia ciudadana por malos manejos en la que no se haya procedido legalmente.
Exhortó a la ciudadanía a tener valor civil para denunciar hechos de corrupción y a no hacer segundas o terceras consideraciones por el resquemor de provocar escándalo u otras cuestiones ``que no tienen nada que ver con el Estado de derecho''.
De igual modo, admitió que ese vicio entraña también un cambio en los sistemas gubernamentales, como la desregulación y la simplificación administrativa, para que no haya condiciones que propicien malos manejos. ``La corrupción enfatizó es una clara violación a la ley, es el coecho, es utilizar indebidamente el puesto público para hacerse de un beneficio no legítimo, es presionar a los ciudadanos para propósitos no legítimos, es todo eso que conocemos y que repudiamos''.
Luego de entrevistas, por la mañana, a la televisora local y a una radiodifusora, Zedillo ocupó gran parte de su segundo día en Nuevo León en reuniones privadas con representantes de los principales periódicos de la entidad, con dirigentes sindicales y de empleados del Estado y también recibió a los líderes del Partido del Trabajo.
En relación con la reforma política, planteó que lograr un consenso amplio siempre es tarea difícil, pero de nuevo dijo tener ``plena confianza'' en que los partidos políticos y sus legisladores llegarán a acuerdos. Sin embargo, asumió que hoy se vive un periodo importante porque es la etapa final de la negociación y eso da lugar a ciertas preocupaciones e incluso tensiones por la natural confrontación de puntos de vista y propuestas.
Sobre los comicios del próximo año, respondió que la configuración del Congreso en el 97 y en los trienios por venir, dependerá únicamente de la voluntad popular y se excusó de hacer pronósticos.
Admitió empero que dada su filiación política, desea legítimamente que gane su partido, pero recalcó que todo dependerá de la votación ciudadana. ``Yo espero que mi partido haga todo su esfuerzo... en los términos permitidos por la ley, para que resulte triunfante; pero también sé que los otros partidos, legítimamente estarán haciendo también su mayor esfuerzo democrático para recibir el respaldo popular'', destacó Zedillo.
También se refirió al debate que convocó sobre el modelo económico, pues dijo que ``a últimas fechas ha habido una noción, desde mi punto de vista equivocada, atribuyéndole a las políticas de apertura, de responsabilidad fiscal, de reducción del tamaño del Estado, la causa de todos los males económicos de corto plazo que estamos enfrentando. Ha habido un intento de descalificar esas políticas en las que yo creo y estoy convencido que son las que significan el camino más corto para que nuestro país se desarrolle''.
No se vale, añadió, que el gobierno pretenda unilateralmente convencer a los mexicanos y por ello es que quienes disienten deben exponer sus puntos de vista positiva y constructivamente.
Luego, al reclamo por mayores participaciones federales para Nuevo León que escuchó en varios actos de esta gira, respondió que tales ingresos se distribuyen por un acuerdo de coordinación fiscal y que si bien todos los estados tienen buenos argumentos para reclamar mayores recursos, deben considerarse no sólo razones económicas, sino también sociales.
Sobre los que llamó ``grupos que pretenden representar los intereses de los deudores'', Zedillo, lo mismo que ayer, insistió en que asumen actitudes demagógicas porque el dinero prestado no es de los bancos sino de los ahorradores.
Lo que proponen esas personas, expuso, ``es una confiscación, yo diría un hurto, un robo de los dineros que los ahorradores depositaron en los bancos y, por supuesto, el gobierno lo rechaza porque es una salida fácil''.
Y a pregunta expresa, se refirió a su papel como presidente y la obligación de ajustarse rigurosamente al ejercicio de sus facultades consitucionales y permitir que los otros poderes ejerzan las suyas, resaltando que la sociedad civil debe jugar el papel que le corresponde en las tareas del desarrollo nacional.
Antes de regresar al Distrito Federal, puso en marcha la Campaña Nacional de Prevención de Adicciones y ratificó que su gobierno está resuelto a seguir el firme combate a las bandas de criminales que se dedican a la producción, transporte y distribución de drogas, así como al lavado de dinero y los delitos asociados ello.