No hemos fracasado; necesitamos movernos en otra dirección, explica un alto funcionario
Ips, Washington, 1o. de julio El Banco Mundial (BM) celebrará foros públicos en los países en desarrollo que aplican las políticas de ajuste estructural recomendadas por este organismo, con el propósito de evaluar el impacto en poblaciones con un alarmante número de pobres (la tercera parte de los latinoamericanos se insertan en esta categoría, según el informe anual del propio BM).
La iniciativa, propuesta por Organismos no Gubernamentales (ONG) de los países en desarrollo --fundamentalmente-- y la entidad mundial, considera organizar foros en 10 o 12 países para recoger opiniones y sugerencias de sindicatos, asociaciones de campesinos y, en general, de miembros de la sociedad civil.
Lyon Square, directora de Políticas Sociales del Banco Mundial, será la responsable, en coordinación con las ONG, de organizar ese encuentro sin precedentes que podría efectuarse en octubre y prolongar sus trabajos al menos por un año.
Otra iniciativa interna del BM consiste en constituir un grupo de trabajo sobre desarrollo social, encabezado por el vicepresidente del organismo para América Latina y el Caribe, S. J. Burki.
La persistencia de la pobreza absoluta en gran parte del mundo en desarrollo en las últimas dos décadas, fuera del este de Asia, revela que el crecimiento económico no es suficiente para aliviar la miseria, dijo Burki la semana pasada durante una reunión auspiciada por el Diálogo Interamericano.
``No estamos diciendo que hemos fracasado. Necesitamos movernos en otra dirección'', señaló el funcionario.
Fuentes del organismo citadas por Ips, indicaron que nadie predice el final del modelo de desarrollo amigo del mercado que enarbola la institución financiera, pero varias señales indican un serio examen de enfoque, atribuido en buena medida a James Wolfensohn, presidente del organismo.
El año pasado, durante su primera reunión anual como presidente, Wolfensohn señaló que el número de personas en la pobreza absoluta --quienes sobreviven con el equivalente de menos de un dólar diario-- aumentó de mil millones a mil 300 en sólo cinco años. Advirtió: ``La distribución de los beneficios del crecimiento presenta uno de los más serios desafíos a la estabilidad mundial y debemos aprender sobre el por qué y cómo de la distribución del ingreso''.
Al representar la mayor fuente de asistencia al desarrollo, el Banco Mundial y sus recomendaciones financieras tienen enorme influencia sobre los países pobres, en particular los ubicados en Africa, el sur de Asia, América Latina y el Caribe. Los donantes bilaterales y otras agencias multilaterales suelen condicionar el apoyo a los beneficiarios a la adopción de las políticas del BM.
Estas políticas están diseñadas para promover el crecimiento económico y atraer inversión extranjera, e incluyen medidas como: reducción del déficit del sector público, venta de empresas públicas, estímulo de las industrias exportadoras y apertura de los mercados internos a la competencia extranjera.
Tales políticas han sido atacadas por las ONG de los países en desarrollo. Entre otras quejas, las ONG han planteado que esas reformas tienen un impacto más duro sobre los pobres, cuya proporción ha crecido en los países seguidores de los lineamientos del BM.