Exige el jefe rebelde al gobierno definirse sobre la paz digna y justa

José Gil Olmos, enviado, Elio Henríquez, corresponsal, San Cristóbal de las Casas, Chis., 30 de junio A dos años y medio de su aparición pública, el subcomandante Marcos aseguró que el Ejército Zapatista de Liberación Nacional (EZLN) está dispuesto a seguir la lucha por la vía política, ``hasta sus últimas consecuencias'', para conseguir democracia, libertad y justicia en el país.

En el Teatro de la Ciudad de San Cristóbal, donde se reunieron unos 800 invitados de varias partes del país, el dirigente zapatista precisó que el EZLN no hace un llamado a la ``vía violenta'', sino a construir el camino político para el cambio democrático que el ``poder'' ha cancelado a millones de mexicanos, y a la construcción de un amplio frente opositor.

En San Cristobal de las Casas, Marcos en el
foro para la reforma del Estado. Foto: Afp

Luego de que el comandante David inaugurara los trabajos del Foro Especial para la Reforma del Estado y reconociera el apoyo de las comisiones Nacional de Intermediación (Conai) y de Concordia y Pacificación (Cocopa), el vocero zapatista reiteró la decisión del EZLN de convertirse en ``una fuerza política'', como se dio a conocer el primero de enero de este año a través de la cuarta Declaración de la Selva Lacandona.

En su segunda visita a esta ciudad en lo que va del año, en este teatro ideado por el ex gobernador Patrocinio González Garrido, que costó más de 35 millones de pesos y que los rebeldes estuvieron a punto de destruir el primero de enero del 94, el subcomandante Marcos retó al gobierno federal a dar muestras de ``voluntad, inteligencia e imaginación'' para solucionar el conflicto chiapaneco, ``nombre que el gobierno da a la guerra contra los indígenas mexicanos'', precisó.

Antes de leer el largo comunicado zapatista, el dirigente rebelde confió a los asesores, miembros de comités civiles de diálogo e integrantes de organizaciones urbanas, populares y campesinas, que al partir del poblado de La Realidad y entregar las armas ``estaban nerviosos'', porque pensaron que no llegarían al Teatro de la Ciudad de San Cristóbal de las Casas.

``La sombra de la traición, la certeza de una amenaza reiterada en todas partes, la prisión o la muerte como pago, es el destino probable de los delegados'', advirtió.

Marcos aseveró que el sistema político, que se empeña en mantenerse cerrado y excluyente, y el modelo económico, que aumenta la criminalidad hasta la ficción, ``hacen posible el caldo de cultivo'' para el surgimiento de organizaciones políticas armadas. En ese sentido, aseguró que ``lo más saludable'' sería modificarlo radicalmente y alcanzar uno abierto, equilibrado y racional.

``Nosotros --dijo Marcos-- nos alzamos por la democracia, libertad y justicia. Tenemos voluntad de llegar a ellas por vías políticas. Estamos dispuestos a todo por alcanzarlas; estamos dispuestos a llegar hasta las últimas consecuencias. ¿Hasta dónde está dispuesto a llegar el gobierno? ¿Hasta cuándo? ¿Cuál es la fecha límite para lograr la paz justa y digna? ¿Cual es el calendario al que hay que ajustarse para lograr que se respete el derecho a luchar por ser mejores? ¿Son la soberbia de sus negociadores y sus planes de escalar a puestos públicos los parámetros para decidir la paz o la guerra? Nosotros estamos dispuestos a dar todo por un país mejor, ¿cuánto está dispuesto a dar el gobierno por alcanzar la misma meta?''

El subcomandante del EZLN finalmente aclaró que este foro no tiene como destinatarios al gobierno, el Congreso de la Unión o la mesa de San Andrés Larráinzar, o que sirva a personalidades y líderes para hacer declaraciones, sino que funcione de ``interlocutor'' de la sociedad, como fuente de propuestas sobre la transición a la democracia y de esfuerzos encaminados a la construcción de un amplio frente opositor.