La Jornada 26 de junio de 1996

Revelan juntas secretas entre altos mandos militares de EU y Cuba

Afp, Ap, Efe, Reuter y Pl, Washington, 25 de junio Estados Unidos calificó hoy como ``disparates'' las acusaciones de Cuba según la cuales Washington manipuló los resultados de la investigación internacional sobre el derribo de dos avionetas civiles estadunidenses por cazas cubanos, al tiempo que legisladores republicanos de origen cubano denunciaron reuniones secretas de altos mandos de las fuerzas armadas estadunidenses con sus homólogos cubanos.

Una cinta de video enviada anónimamente a la cadena Univisión y al legislador republicano de origen cubano, Lincoln Díaz Balart, muestra imágenes del almirante Michael Haskins y otros oficiales, durante un encuentro con militares cubanos en 1995, en el cual aparentemente intercambian regalos como una placa y un mapa.

``El video refleja el acercamiento privado entre el gobierno de Bill Clinton y el régimen de Fidel Castro'', consideró Díaz Balart.

Haskins declaró en 1995 a periodistas que recorrían la base de Guantánamo, que se reunió personalmente con oficiales cubanos para disponer la repatriación de refugiados que no fueron admitidos por Estados Unidos.

De todos modos, la también legisladora republicana por Florida de origen cubano, Ileana Ros, anunció que esta tarde participó en una reunión ``clasificada'' con el titular de la Agencia Central de Inteligencia (CIA), John Deutch, y con el subsecretario de Estado, Peter Tarnoff, para ``reclamar explicaciones sobre el caso''.

Las relaciones entre Estados Unidos y Cuba, que bajo el gobierno de Clinton habían ingresado en una etapa de distensión, se deterioraron hasta el nivel de la época de la guerra fría luego del derribo de las avionetas el 24 de febrero pasado.

Glyn Davies, portavoz del Departamento de Estado, declaró hoy que las acusaciones de La Habana sobre la manipulación del informe de la Organización de Aviación Civil Internacional (OACI) ``no tienen ningún sentido''.

Davies manifestó su ``esperanza'' de que mañana (hoy miércoles) el Consejo de la OACI confirme la postura de Washington de que las dos avionetas de Hermanos al Rescate, con sede en Miami, fueron derribadas el 24 de febrero pasado cuando volaban en espacio aéreo internacional.

``Creemos que el informe --dijo Davies-- demostrará asimismo que las autoridades cubanas no cumplieron la norma internacional en relación con la advertencia que debían haber realizado antes de disparar sobre inocentes''.

La delegación estadunidense al Consejo de la OACI, estará encabezada por el secretario de Transportes, Federico Peña, ``para resaltar la importancia que damos al caso y ver las acciones que se pueden adoptar al respecto'', agregó.

Pese a que el informe aún no ha sido difundido oficialmente, el Departamento de Estado advirtió la semana pasada que Estados Unidos buscará que el Consejo de Seguridad tome medidas contra Cuba, con base en las conclusiones de ese documento.

Washington impuso sus propias sanciones a La Habana poco después del derribo con la promulgación de la ley Helms-Burton, que endureció el bloqueo de más de tres décadas contra la isla. Cuba, que sostiene que las aeronaves se hallaban sobre sus aguas, acusó la víspera a Estados Unidos de haber realizado reuniones secretas y pactado con los investigadores de la OACI, los resultados del informe ordenado hace cinco meses por la ONU.

Para los cubanos, la revisión del informe tendrá lugar de manera ``precipitada'', después de dos aplazamientos solicitados por Estados Unidos, ya que se realizará el mismo día en que finaliza el actual periodo de sesiones de la OACI, con el tratamiento de una veintena de temas.

El gobierno de La Habana insistió hoy en rechazar ``de antemano'' lo que calificó de ``veredictos sobornados'' de la OACI y pidió a Naciones Unidas que no permita más violaciones a su espacio aéreo.

``Desearía que (la OACI) no haya vendido información a una de las partes en disputa en beneficio de otra, porque sería un grave delito de revelación o falsificación de pruebas'', dijo hoy el canciller cubano, Roberto Robaina.

``Cuba --agregó-- no acepta veredictos sobornados ni se presta como pieza de juego en el matrimonio de conveniencia que han armado investigadores de Estados Unidos'' con ese organismo.

Washington ``no sólo le ha impuesto un informe a la OACI, sino que también ya están anunciando conclusiones que le van a imponer al Consejo de Seguridad'', dijo.

El gobierno cubano advirtió hoy que las violaciones a su espacio aéreo podrán ser ``detenidas o alentadas'' por el dictamen de la OACI, en una nota oficial enviada al Consejo de Seguridad y a la Asamblea General de la ONU.

Por otra parte, grupos del exilio cubano prevén realizar una nueva flotilla marina, escoltada por aviones, hacia aguas cubanas el 13 de julio para conmemorar el segundo aniversario del naufragio de un remolcador, donde perdieron la vida 41 balseros. ``Por lo visto --concluyó Robaina-- los efectos del unipolarismo y prepotencia imperial llegaron también a la OACI, si es que no estaban desde antes''.