Bajaron 12.4% los ingresos tributarios de enero a marzo

Juan Antonio Zúñiga Afectados por la situación económica general y el costo recaudatorio de las modificaciones fiscales aplicadas para atemperar el impacto de la crisis en las personas y las empresas, los ingresos tributarios del gobierno federal tuvieron un descenso anual de 12.4 por ciento en términos reales durante el primer trimestre de este año, indican informes de la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP).

Con excepción del Impuesto al Valor Agregado (IVA), el resto de los gravámenes tributarios registraron caídas reales en su recaudación, lo que redujo la capacidad del gobierno para financiar con este tipo de ingresos su gasto y, simultáneamente, disminuyó también la importancia relativa de los recursos impositivos en el monto total de las percepciones presupuestales.

Durante el primer trimestre de 1995, una vez que la economía mexicana entró en recesión, el monto de la recaudación tributaria fue suficiente para financiar el 76 por ciento del gasto total ejercido en el mismo tiempo, mientras que en los primeros tres meses de 1996 los ingresos tributarios representaron el 65 por ciento del gasto gubernamental.

El descenso de la recaudación tributaria ocasionó también que su participación dentro de los ingresos presupuestales se redujera al 64 por ciento en el primer trimestre de este año, cuando en el mismo periodo de 1995 significó el 70 por ciento.

El más afectado por la caída de la recaudación tributaria fue el Impuesto sobre la Renta (ISR), considerado como el eje de la política impositiva, el cual tuvo una contracción real de 23.5 por ciento respecto a los ingresos obtenidos por su aplicación entre enero y marzo de 1995.

El informe hacendario señala que el monto nominal de los ingresos percibidos a través del ISR, durante los primeros tres meses de 1996, fue de 21 mil 511.5 millones de pesos, una cantidad equivalente al 92 por ciento de los recursos que se destinaron durante el mismo periodo a pagar los intereses del sector público, los cuales se elevaron a 23 mil 432.3 millones de pesos.

El Impuesto Especial sobre Producción y Servicios aportó un monto de recursos 18.9 por ciento inferior en su poder de compra respecto a lo recaudado por su aplicación en los primeros tres meses del año pasado.

Sobre este gravamen, la Secretaría de Hacienda explica que parte de la caída se explica por la contracción y reorientación del consumo hacia productos de menor precio en bebidas alcohólicas, cervezas y tabacos. Pero también por el impacto de la reducción del precio de venta de las gasolinas y diesel en el mercado interno en su medición en dólares, el cual es compensado con aumentos recíprocos en los derechos de extracción de petróleo.

Los ingresos federales por la aplicación del Impuesto a la Importación tuvieron un descenso real de 18.4 por ciento ``debido fundamentalmente a la reducción de las importaciones sujetas al pago de arancel y la reducción de la tasa efectiva del impuesto, derivada del Tratado de Libre Comercio de América del Norte''.

El Impuesto al Valor Agregado fue el único gravamen que presentó aumentos en su recaudación, la cual superó en 15.2 por ciento a la obtenida en el primer trimestre del año pasado, debido a la elevación de 50 por ciento en su tasa impositiva, que pasó de 10 a 15 por ciento; pero que también se vio afectada por la reducción --de 15 a cero por ciento-- en el consumo doméstico de agua.