Zedillo: inseguridad, el mayor problema del DF

Roberto Garduño y Víctor Ballinas Criminalidad y violencia son los problemas más graves que enfrentan las autoridades federales en la capital del país, reconoció ayer el presidente Ernesto Zedillo. Aseguró que "no se escatimará decisión ni esfuerzo alguno para mejorar la seguridad en la capital de la República".

Al presentarse los resultados de la Alianza para la Recuperación Económica en el Distrito Federal, el mandatario confió en que muy pronto con las nuevas autoridades policiacas del Distrito Federal, "la ciudadanía perciba una mayor eficacia en los cuerpos responsables de ofrecerles protección frente al crimen".

Antes de partir rumbo a Canadá, en la Residencia Oficial de Los Pinos, ante dirigentes obreros, campesinos y empresariales, el ejecutivo federal se refirió a los incentivos fiscales para los inversionistas en la capital del país; a la ampliación de las actividades económicas, y a la importancia del acuerdo para la desregulación empresarial, que si bien lleva "un buen grado de avance" tiene que deshacerse de sus lastres burocráticos.

"Sin embargo, es mi convicción de que debe irse más lejos y más rápido modificando otras leyes, reglamentos y prácticas que hoy imponen una serie de obstáculos burocráticos que no tienen hoy ninguna razón de ser", expuso.

Insistió en que la ciudad de México debe convertirse en un ejemplo de desregulación para todo el país, si quiere alcanzar niveles de crecimiento sostenido.

También aseguró que la capital del país enfenta problemas que se acumularon por muchos años, "cuya atención se soslayó, se postergó o se condicionó", y se refirió a los impulsos para la democratización, para los que se acordaron los cambios sucesivos en el país:

"Sin embargo, debemos reconocerlo, los habitantes de la capital siguen siendo los únicos en el país, que no ejercen plenamente sus derechos políticos. Hoy afortunadamente el Distrito Federal está poniendose al día del avance democrático..."

Recordó que en la ciudad de México ya se tiene un acuerdo entre los partidos políticos para elegir en 1997, de manera directa, al regente.

Ante representantes obreros, campesinos y empresariales, Ernesto Zedillo señaló que gobierno trabaja para alcanzar un crecimiento económico vigoroso, que restituya los empleos que se han perdido con la crisis económica y los que se necesitan para abatir el rezago histórico en el DF.

"Se trabaja en la recuperación con una visión de lagro plazo, de manera que las acciones para resolver los problemas del presente se inscriban en una estrategia integral para el futuro. La estrategia se orienta a revertir los desequilibrios producidos por el enorme crecimiento de la capital del país.

"La cuestión de fondo, como aquí se ha dicho, es garantizar la viabilidad política, económica y social de la capital", precisó.

En la alocución resaltó que los habitantes de la tercera capital más poblada del mundo, "saben que con sus contribuciones y su participación" es posible garantizar, extender y mejorar los servicios básicos, y que por ello se está mejorando la administración y la operación de los servicios de agua potable, de drenaje y de recolección de basura.

Al finalizar su discurso, el presidente Zedillo instó a los funcionarios del Departamento del Distrito Federal a que redoblen su esfuerzo con perseverancia y espiritú de servicio, por que "juntos haremos que el DF se convierta en un espacio amable, pródigo y seguro".