La Jornada 11 de junio de 1996

600 mil mujeres mueren al año por causas ligadas al embarazo y parto

Efe, Dpa, Reuter, Afp y Ansa, París, 10 de junio Unas 600 mil mujeres mueren cada año por causas ligadas con el embarazo y el parto, y al menos 15 millones sufren lesiones por el mismo motivo, afirmó hoy el Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia (Unicef). El organismo informó que ocho millones de niños mueren anualmente por enfermedades prevenibles, y al destacar la creciente brecha entre naciones en desarrollo e industrializadas, criticó la disminución de la ayuda a países del Tercer Mundo.

En su informe anual, divulgado simultáneamente en París, Nueva York y Londres, la Unicef dedicó especial atención al problema de la maternidad y señaló que la misma constituye la mayor causa de muerte e incapacidad en mujeres jóvenes en los países en vías de desarrollo.

En estas naciones mueren mil 600 mujeres --algunas se ellas adolescentes-- cada día durante el embarazo y el parto; muchos de esos decesos son fácilmente evitables, indicó Carol Bellamy, directora ejecutiva del organismo.

El informe añadió que por cada mujer que fallece, 30 más sufren serios problemas de salud relacionados con la concepción, que afectan actualmente a unas 300 millones de mujeres adultas en el mundo.

Las estadísticas muestran que 23 mil de las 585 mil muertes anuales corresponden al continente americano, pero la región más afectada es Asia y el Pacífico con 291 mil fallecimientos por año; seguida por Africa, al sur del Sahara, con 210 mil; Medio Oriente septentrional con 35 mil; Asia central con 14 mil, y Europa con tres mil.

El estudio señaló como países más gravemente afectados en América Latina a Haití, con mil decesos por cada 100 mil nacimientos; Bolivia con 650; El Salvador, 300; Perú, 280; Honduras y Brasil, 220, y Guatemala con 200. México está en el lugar trece con 110.

En Asia, el país más afectado es Afganistán con mil 700 por cada 100 mil nacimientos; seguido de Bután con mil 600, y Nepal con mil 500. En Africa, Sierra Leona tiene mil 800 decesos, y Somalia y Guinea mil 600 cada uno. En tanto que Yemen, en Medio Oriente, reporta mil 400 decesos.

En Europa, las cifras son más bajas, ubicándose Rumania a la cabeza con 130 por cada 100 mil nacimientos y después Rusia con 75.

La investigación de la Unicef, con apoyo de la Organización Mundial de la Salud (OMS), señaló como principales causas de estas muertes las hemorragias, los intentos de aborto autoinducido, las infecciones y el trabajo de parto obstruido, aunado a problemas de desnutrición y enfermedades menores.

Para paliar el problema, la Unicef recomendó promover el acceso a los servicios de planificación familiar y promover una mejor educación nutricional y cuidados adecuados.

Se refirió también a la brecha que existe entre los países pobres y los industrializados y criticó la disminución de la ayuda a las naciones en vías de desarrollo, en donde las enfermedades comunes y prevenibles, como el sarampión, el paludismo, las diarreas y la neumonía, cobran la vida de ocho millones de niños cada año.

Explicó que todos estos males --superados hace ya mucho tiempo en naciones industrializadas-- causan la muerte de 25 menores cada día, pese a que la prevención y el tratamiento son muy baratos.

El documento subrayó que la ayuda al mundo en vías de desarrollo ha alcanzado su nivel más bajo en los últimos 20 años, para situarse en 0.3 por ciento del producto nacional bruto (PNB) global, frente al objetivo fijado por Naciones Unidas en 0.7 por ciento.

En tanto, en Viena, una conferencia sobre trata de mujeres indicó que el tráfico procedente de Europa central y del este a las naciones de la Unión Europea aumentó en forma considerable durante los últimos cinco años, para beneficio de las redes de traficantes que ven en ellas una ``mercadería fácil y lucrativaÕÕ.

La comisaria de Justicia e Interior de la Unión Europea, Anita Gradin, indicó que entre 200 mil y 500 mil mujeres, en su mayoría jóvenes del este de Europa, fueron atraídas a Occidente con falsas promesas por pequeñas asociaciones criminales. Gradin añadió que ninguna nación está libre del tráfico de mujeres, empujadas por las condiciones de pobreza en su países.

Añadió que en muchos países europeos el número de prostitutas extranjeras supera con creces al de las nacionales, y ejemplificó con Italia, donde éstas representan 80 por ciento del total, y en Alemania 75.