Ningún agente extranjero en la captura del boliviano Pereyra: PGR
Ciro Pérez Silva y Notimex La Procuraduría General de la República (PGR) negó ayer que en la captura de tres presuntos narcotraficantes vinculados con el cártel que encabeza Amado Carrillo Fuentes, hayan participado agentes extranjeros.
Precisó además que la aprehensión de los mexicanos Carlos Barbosa e Irán Nogales y del boliviano José Luis Pereyra, quienes al momento de su detención tenían en su poder cerca de dos millones de dólares, no se llevó a cabo en el aeropuerto internacional de la ciudad de México, sino en un hotel del Distrito Federal.
La captura de los presuntos narcotraficantes, asegura la dependencia, se realizó el pasado miércoles 29 de mayo y en la operación participaron ``agentes de la dependencia. El boliviano José Luis Pereyra fue puesto a disposición de las autoridades migratorias, mientras que Barbosa y Nogales fueron llevados al Ministerio Público Federal.
A su vez, el director de la política antinarcóticos de Estados Unidos, Barry McCaffrey, reconoció ``el compromiso y las acciones'' de México en la lucha contra el tráfico de estupefacientes y calificó de ``honestos y patriotas'' al presidente Ernesto Zedillo, al secretario de la Defensa Nacional, Enrique Cervantes Aguirre, y al procurador general de la República, Fernando Antonio Lozano Gracia.
En una entrevista publicada ayer en el diario San Diego Union Tribune, McCaffrey aseguró que en 1995 el Ejército Mexicano destruyó más drogas que cualquier otra institución en el mundo y consideró que si la lucha conjunta de Estados Unidos y México contra los estupefacientes tiene éxito, ``el imperio de la droga se trasladará (de la frontera común) a los puertos de Seattle o Nueva York''.
Al referirse a los encargados del combate al narcotráfico en México, McCaffrey dijo que son ``honestos, con enorme talento y gente patriota comprometida con detener el embate fundamental (del narcotráfico) contra México''.
Destacó que en la frontera con México, particularmente en el área de San Diego, los decomisos de droga se han reducido y han aumentado en la zona caribeña de Puerto Rico e Islas Vírgenes. ``Dentro de diez años, el cruce de drogas desde México será muy diferente'', estimó.
Admitió que en su país hay ''2 millones 700 mil adictos crónicos'', de los que ''2 millones 100 mil son adictos a la cocaína y 600 mil a la heroína''.
Lavadólares detenidos en MéxicoAcerca de los tres presuntos narcotraficantes detenidos en México en posesión de casi 2 millones de dólares, la PGR informó oficialmente de la aprehensión el sábado pasado a pesar de que la operación concluyó el miércoles 29 de mayo, lo cual provocó la circulación de distintas versiones dentro de la propia institución y en Estados Unidos.
Según versiones difundidas en ese país, el narcotraficante boliviano José Pereyra Sales, uno de los principales lavadólares de las mafias de Estados Unidos, México y Colombia, fue capturado en el aeropuerto de la ciudad de México y deportado inmediatamente a Estados Unidos vía Miami.
Una de las versiones afirman que el narcotraficante presuntamente ligado al cártel de Juárez de Amado Carrillo Fuentes fue aprehendido en el Distrito Federal por integrantes de un ``grupo de élite'' del Ejército Mexicano.
La otra versión, de fuentes judiciales mexicanas, revela que en la detención del narco sudamericano participó un grupo de integrantes de la Agencia Antinarcóticos Estadunidense (DEA) que habría coordinado la operación en territorio nacional.
En México se informó además que Pereyra viajaba en un avión procedente de Bogotá, Colombia, en compañía de los ciudadanos mexicanos Carlos Barbosa e Irán Nogales. Los presuntos traficantes de drogas ``traían consigo 2 millones de dólares en efectivo y pequeñas dosis de cocaína''.
Mientras, en Estados Unidos, fuentes de la DEA en Miami informaron que el miércoles o jueves de la semana pasada 64 agentes de esa agencia cercaron en el aeropuerto de esa ciudad estadunidense un avión procedente de México y detuvieron a un pasajero acusado por las autoridades estadunidenses de pertenecer al cártel de Cali.
José Pereyra Sales, uno de 59 miembros de una organización de narcotraficantes formalmente acusados en Miami el año pasado como resultado de la operación Cornerstone, fue bajado del avión que hacía escala en su trayecto entre México y Bogotá o La Paz, informaron fuentes en Miami. Las autoridades mexicanas detuvieron a Pereyra Sales, alias Jota, la noche del miércoles y, según fuentes gubernamentales en Estados Unidos, acordaron extraditarlo a Sudamérica.
Sin embargo, una fuente enterada del caso reveló que el gobierno mexicano también se comunicó con la DEA y le informó de la captura de Pereyra Sales; de esta manera, los agentes de esa dependencia estuvieron en el aeropuerto de Miami cuando llegó el avión. Voceros del Departamento de Justicia de Estados Unidos no respondieron a llamadas telefónicas para dar información sobre el caso y algunos detalles por ejemplo si al detenido lo habían extraditado de México a Colombia o Bolivia todavía no se han confirmado oficialmente.
Además, un funcionario de la administración del presidente Bill Clinton señaló que es posible que Colombia o Bolivia, y no México, pudieran haber informado a la DEA de la llegada de Pereyra Sales a Miami.
Según versiones preliminares, las autoridades mexicanas detuvieron a Jota el miércoles. La detención, de acuerdo con otra versión, la habría realizado una unidad de élite del Ejército Mexicano. Lo que no está a discusión es que en la noche del miércoles o a primera hora del jueves, un avión que transportaba al presunto narco aterrizó en Miami y de inmediato lo cercaron agentes de la DEA, quienes bajaron a Pereyra Sales del avión y lo mantienen bajo custodia.
En circunstancias normales, Pereyra Sales debería de haber sido presentado ante un juez para una primera audiencia el jueves o el viernes de esta semana, pero todavía no ha sido presentado ante una corte en Miami. Esto ha llevado a que algunas fuentes que conocen del caso especulen sobre la posibilidad de que Jota ha decidido cooperar con la DEA a cambio de inmunidad en el caso.
En junio de 1995, Pereyra Sales fue uno de los 59 acusados de ser parte de un caso de negocio ilícito del cártel de Cali. La fiscalía alegó para la acusación que el cártel colombiano controlado por los encarcelados hermanos Rodríguez Orejuela, ofrece en Estados Unidos 80 por ciento de la cocaína y que la organización habría enviado unas 210 mil toneladas de esa droga.