La Jornada 23 de mayo de 1996

Secretaría de Energía: no se ha cancelado la privatización de petroquímicas

Víctor Cardoso, Raúl Llanos y Ana Salazar, corresponsal La Secretaría de Energía rechazó que el proceso de venta de las plantas de petroquímica secundaria de Petróleos Mexicanos (Pemex) se haya cancelado y aseguró que ``no existe ningún proyecto en manos del presidente de la República que contenga la determinación de frenar la privatización''.

La dependencia sostuvo que ningún funcionario de esa secretaría ha planteado que el gobierno federal haya decidido ``frenar'' la desincorporación de los activos de la petroquímica secundaria.

Asimismo, criticó las versiones de algunos legisladores que, pidiendo mantener en reserva su identidad, dijeron que la venta de las 61 plantas petroquímicas de Pemex fuera a suspenderse y que recibieron presiones y ofertas de dinero de empresas interesadas y funcionarios gubernamentales.

``Consideramos que estas afirmaciones, que se cubren en el anonimato, contribuyen a crear un ambiente de suspicacias y sospechas que en nada ayuda a la transparencia que éste y otros procesos públicos deben tener. Además, al poder constituir hechos delictivos, es recomendable que se presenten las denuncias correspondientes a través de los cauces legales establecidos, máxime que se trata de representantes populares''.

La Secretaría de Energía hizo público que se continúa trabajando en el seno de la Comisión Intersecretarial de Desincorporación para responder a las dudas emitidas por los interesados y de la Comisión de Energéticos de la Cámara de Diputados, y se comprometió a que conforme vaya existiendo información sobre la desincorporación del complejo de Cosoleacaque, se hará pública en los medios informativos.

Por otro lado, dirigentes de los principales organismos empresariales afirmaron ayer que sería un ``retroceso'' para el país la posible cancelación de la privatización de la petroquímica secundaria, pues enviaría una ``señal negativa'' a los inversionistas nacionales y extranjeros que se traduciría en la pérdida de la confianza, postergación de inversiones y daría una imagen de inestabilidad interna ante la comunidad internacional.

Los presidentes del Consejo Coordinador Empresarial (CCE), Héctor Larios Santillán, y de la Confederación Patronal de la República Mexicana (Coparmex), Carlos Abascal, así como Raúl Muñoz Leos, director de Dupont-México, por separado manifestaron que el gobierno federal deberá apegarse a su compromiso de vender las plantas petroquímicas, y desterrar los ``miedos o tabús'' de que se daña la soberanía o la independencia del país con esa acción.

En opinión de Carlos Abascal, quien participó en el Primer Encuentro Empresarial del Noroeste, ``es un grave retraso dar marcha atrás a la privatización de un sector hoy ineficiente, no competitivo, rezagado tecnológicamente y para cuyo desarrollo no poseemos los recursos... A la Coparmex, eso le parece un error muy importante''.

Lo que se debe hacer, dijo, es tener la capacidad de volver a darle la estructura jurídica necesaria a los procesos de desincorporación de ese sector a fin de recuperar el tiempo perdido. ``Habrá un rezago que será negativo para México, pero se deben hacer bien las cosas y seguir adelante, porque el país no se puede detener ante intereses de grupos de poder'', señaló.

--¿Se pierde la confianza de los inversionistas?

--Sí, desde luego, en especial de aquéllos que tenían un fuerte interés en participar en esta industria y desde luego da una señal equivocada a los ojos de los inversionistas internacionales.

--¿Cuál debe ser la actitud del gobierno federal?

--Restablecer el proceso con certidumbre jurídica a la brevedad posible.

En su opinión, en la medida en que la petroquímica no sea competitiva mundialmente, se desviarán recursos fiscales --que podrían utilizarse para el desarrollo del país-- en subsidiar la incapacidad de esta rama de actividad. Advirtió que ``se nos puede desmoronar en las manos y entonces los empleos que hoy supuestamente se defienden acabarían por perderse'', remarcó.

Los empresarios mexicanos, expresó Abascal Carranza, ``estamos frente a un contratiempo y vamos a vencerlo. No se perderá, se retrasará, pero debemos tener la capacidad de revertir esta decisión que a nuestro juicio es contraria a los intereses nacionales''.

De igual manera, el presidente de Coparmex consideró que la posible cancelación de la venta de petroquímicas retrasaría la aplicación del Plan Nacional de Desarrollo (PND), uno de cuyos ejes fundamentales es la privatización de activos del gobierno federal. ``Coparmex piensa que esto todavía no es una pérdida irreparable, piensa que es un retraso, no una derrota''.

Por su parte, Héctor Larios Santillán, presidente del CCE, llamó a las autoridades a ``no tener miedo'' ante ese tipo de decisiones que ayudarán a salir al país de sus problemas ni tampoco verlo como un tabú que pueda dañar la soberanía e independencia de los mexicanos.

Entrevistado luego de participar en el foro organizado por la delegación noroeste de la Coparmex, comentó que es una ``mala señal'' para los inversionistas extranjeros, además de que se echaría por la borda un elemento fundamental para impulsar el crecimiento del país.

Raúl Muñoz Leos, director de Dupont, pidió al gobierno que cumpla con el compromiso ya establecido de privatizar la petroquímica, y luego de ello agilizar el proceso, porque su demora está causando mucho daño a la economía mexicana.