Buscaremos que la Helms-Burton afecte lo menos posible a países amigos: Christopher
Jesús Aranda y David Aponte El secretario de Estado estadunidense, Warren Christopher, señaló ayer que será en agosto cuando el Congreso de su país elabore el reglamento de la ley Hemls-Burton, en el cual su gobierno buscará ``minimizar'' los efectos en los ``países amigos'', y agregó que se estudia otorgar la facultad de desistimiento en el ejercicio de la misma.
``Creo que los reglamentos van a tener cierta perspectiva para los que inviertan en el futuro; a las personas que ya están dentro de los efectos de esa ley, les voy a dejar con la idea de que esperen a que se redacten los reglamentos dentro del contexto que queremos: maximizar la presión en el gobierno cubano y minimizar los efectos negativos en los países vecinos'', precisó a los miembros de la Cámara Americana de Comercio.
Warren Christopher y José Angel Gurría
durante la
conferencia de prensa conjunta en la Secretaría de
Relaciones Exteriores. Foto: Raúl Ortega
Por otra parte, al término de la decimotercera Reunión Binacional México-Estados Unidos, el canciller mexicano, José Angel Gurría, justificó que en las conclusiones del encuentro no se hiciera ninguna mención al respecto:``En el caso de la Mesa de Asuntos Políticos no hubo un informe (sobre la ley Helms-Burton), en virtud de que hicimos comentarios de carácter más amplio, pero ciertamente se trató''.
Gurría explicó que estos comentarios no se incluyeron en las conclusiones de las Mesas de Trabajo, como tampoco lo fue el tema de la cooperación entre la Secretaría de la Defensa Nacional y el Departamento de Defensa de Estados Unidos, que se limitan a cuatro áreas: entrenamiento, equipamiento, desastres naturales y lucha contra el narcotráfico, ``en virtud de que los secretarios Enrique Cervantes y William Perry se acaban de reunir hace pocos días en Washington.
Warren Christopher explicó durante el encuentro que sostuvo en la mañana con empresarios de la Cámara Americana de Comercio, que la intención del gobierno del presidente Bill Clinton es la de ``maximizar'' la presión en contra del gobierno de Cuba, el cual ``no va hacia la democracia, ni hacia los mercados libres, sino en otras direcciones''.
``Les voy a dejar con la idea de que esperen a que se redacten los reglamentos'', comentó Christopher.El funcionario estadunidense, quien asistió al desayuno acompañado de casi la totalidad de su delegación, recordó que la ley Helms-Burton fue promulgada después de que dos aviones norteamericanos fueron derribados de manera injustificada por aeronaves cubanas.
``Tal vez comentó el año pasado ustedes vieron un diálogo más abierto (entre Estados Unidos y Cuba), pero estas acciones fueron totalmente definitivas para terminar con esa relación.
El evento se significó también por la enorme cantidad de agentes de seguridad estadunidenses, quienes prácticamente ``tomaron'' las instalaciones del hotel en el que se celebró el encuentro. Además de los arcos detectores de metales, los agentes apoyados por un perro pastor alemán revisaban las grabadoras, cámaras fotográficas y de video de los representantes de los medios de información.
Algunos efetivos del Estado Mayor Presidencial que se encontraban en el lugar se limitaron a custodiar las puertas de acceso al salón del acto, mientras que los agentes estadunidenses se encargaban del conjunto de la seguridad.
En su discurso inicial, Christopher habló sobre el excelente estado que guarda la relación bilateral con México y el apoyo del presidente Bill Clinton a los esfuerzos del gobierno mexicano por superar la crisis. En la parte de preguntas y respuestas, los empresarios cuestionaron el impacto de la referida ley y lo referente a los comentarios en su país en el contexto de la campaña presidencial.
Sobre este asunto, el secretario de Estado del país vecino comentó que en su país se vive una democracia ``llena de fuerza y de vigor'', en donde unos aprovechan para criticar en su beneficio.
En este sentido, llamó la atención sobre el hecho de que lo importante es mirar en perspectiva la intención del presidente Bill Clinton de construir la relación con México de una manera muy positiva.
Asimismo, sostuvo que no tiene ``ninguna duda'' de que, ``sea quien gane la elección presidencial en noviembre, el triunfador va a reconocer la importancia básica que tiene una buena relación con México''.
Y concluyó: ``Les pedimos que no escuchen y que no hagan caso de los debates que surjan durante esta carrera presidencial.''