Cita el Senado argentino al canciller y al jefe del ejército, en torno a la venta ilegal de armas a Ecuador y Croacia

Stella Calloni, corresponsal, Buenos Aires, 3 de mayo Los ministros de Relaciones Exteriores, Guido di Tella, y de Defensa, Oscar Camilión, fueron requeridos para una interpelación en el Senado, en una acción conjunta de los opositores Unión Cívica Radical (UCR) y Frente País Solidario (Frepaso) por la venta ilegal de armas argentinas a Ecuador y Croacia.

Camilión, de visita en Montevideo, negó su responsabilidad en la venta de armas al rechazar que hubiera estado al tanto de esa operación, y afirmó que la misma formó parte de una triangulación --las armas estaban destinadas a Venezuela-- en el marco de un desvío que las llevó casi con seguridad a Ecuador.

Recordó que el desvío se produjo después del cese del fuego en el conflicto que enfrentó a ese país con Perú; afirmó que se pretendió involucrar al gobierno de Argentina en la maniobra, pero que éste no tiene ninguna responsabilidad porque desconocía que se hubiera producido una situación de ese tipo.

Esto sucedió después de que el jefe de la Fuerza Aérea, brigadier Juan Paulik, dijera que en febrero de 1995 dio dos avisos a Camilión sobre el vuelo de un avión cargado de armas argentinas a Ecuador. El jefe del Ejército, general Martín Balza, también exigió deslindar responsabilidades. Todos los dedos apuntan a la Defensa.

Sin embargo, el presidente Carlos Menem, cuya firma como la del ministro de Economía, Domingo Cavallo, figura en el decreto de las ventas, ratificó una vez más al ministro de Defensa, cuya renuncia solicita la oposición. El líder de Frepaso, Carlos Alvarez, pidió al gobierno separar a Camilión de su cargo, al menos de manera provisional, mientras la Unión Cívica Radical dijo que en el escándalo ``hay una responsabilidad que llega hasta el presidente''.

Pero el presidente Menem señaló que las demandas de dimisión del ministro de Defensa no tienen fundamento, y aunque aceptó haber firmado decretos autorizando las operaciones de venta de armas, dijo que no fue para Croacia ni Ecuador. ``Si los pertrechos fueron desviados o no, a nosotros no nos consta'', apuntó.

Una investigación llevaría hasta la línea aérea Fine Air, con sede en Miami, que transportó las armas. La mira también está puesta en la empresa fantasma Hayton Trade, con sede en Montevideo, y se dijo aquí que el teniente coronel Diego Palleros, quien estaba a su cargo, habría buscado refugio en Singapur. Al parecer también controlaba la empresa Debrol, que fue la que desvió 6 mil 500 toneladas de armas argentinas a Croacia. Otros de los comentarios que rondan es que el escándalo podría justificar la privatización de Fabricaciones Militares, lo que sería otro duro reajuste para las Fuerzas Armadas.

En otro ámbito, cientos de empleados despedidos protestaron en una comuna del Gran Buenos Aires, en reclamo de las indemnizaciones prometidas por el intendente Juan Carlos Rousellot, acusado de corrupción. La comuna anunció otros 2 mil despidos y lo mismo está sucediendo en distintos puntos del interior del país.

Finalmente, la Asociación de Hijos de desaparecidos en la última dictadura presentó un habeas corpus a la justicia de Argentina, a causa de acciones de intimidación a sus integrantes por parte de desconocidos