No pasa nada. Ese puede ser el resumen de la jornada de manifestaciones que por el Día del Trabajo se realizaron en todo el país. Por fortuna, de todos lados se recibieron informes positivos. Salvo algunos conatos de enfrentamiento de menor cuantía y provocados por organizaciones que no se pueden considerar propiamente sindicales, el reporte de la jornada fue de un ``sin novedad'' generalizado.

Si de algún perdedor se puede hablar, ése sería el anquilosado ``movimiento obrero'' oficialista, o sea las organizaciones agrupadas en el Congreso del Trabajo (CT), que se atemorizaron ante la posibilidad de manifestaciones exageradas de disgusto y prefirieron la seguridad y la calma de sus propias instalaciones.

A la vista los resultados, parecen excesivas sus precauciones. Es cierto que tuvieron el respaldo siempre importante que significa la presencia del presidente de la República, con lo cual su reunión se convirtió en el acto oficial de celebración de la efemérides de los Mártires de Chicago. Pero eso le valió a la cúpula del CT mantenerse alejada o distanciarse más, si se prefiere de las bases de trabajadores que optaron por hacer públicas sus demandas.

Tal vez por ello fue que los dirigentes del CT decidieron deponer su actitud inicial de dureza, cuando anunciaron que serían expulsados los trabajadores afiliados a esa organización que desatendieran la orden de no marchar en los actos del primero de mayo. Cuando se le pidió al actual dirigente del Congreso, Rafael Rivapalacio Pontones, que explicara las razones para este viraje, se limitó a decir que ``es de sabios cambiar de opinión''.

No obstante ese autoproclamada sabiduría, parece más inteligente la actitud asumida por la Federación de Sindicatos de Empresas de Bienes y Servicios (Fesebes), entre cuyos dirigentes destacaron el telefonista Francisco Hernández Juárez y la ex lideresa del magisterio nacional, Elba Esther Gordillo, que al frente de trabajadores de 21 organizaciones llegaron hasta el Zócalo de esta capital, con lo cual evitaron que la principal plaza de armas del país quedara exclusivamente en poder de las organizaciones francamente adversas al régimen. En la marcha de la Fesebes uno de los aspectos más notables fue la demanda de que cambie el modelo económico, petición que cada vez resulta más generalizada.

Hace unos días fue el arzobispo primado de México el que se manifestó en tal sentido, al señalar que no bastan programas de ayuda a los más pobres, sino que se requiere de cambios en el modelo económico.

En el acto oficial de celebración del Día del Trabajo, el presidente Ernesto Zedillo reconoció el esfuerzo de la clase trabajadora para superar la crisis económica y señaló que los mexicanos estamos unidos en la lucha por lograr la recuperación firme y sostenida, pero no habló nada de cambios.

Muchos son los aspirantes

Un total de trece organizaciones políticas han presentado al Instituto Federal Electoral (IFE) solicitud para obtener el registro condicionado y estar en condiciones de poder participar en las elecciones federales del año venidero. No obstante ese elevado número, desde ahora se puede anticipar que no cambiará mucho el actual panorama de los partidos políticos.

Son cinco los institutos políticos que gozan de plenos derechos PRI, PAN, PRD, PT y PVEM y existe otro más que está en una situación intermedia, que es el PFCRN, que por cierto está inmerso en un proceso de reorganización interna. La modificación podría llegar hasta el cambio de nombre, pues una corriente interna desea que se denomine simplemente Partido Cardenista, con lo cual se mantiene el propósito de quitar el uso exclusivo de este histórico apellido al PRD y su ex candidato presidencial Cuauhtémoc Cárdenas.

A esa relación desean sumarse el Auténtico de la Revolución Mexicana (PARM), el Liberal Democrático (PLD), el Revolucionario de los Trabajadores (PRT), el Popular Socialista (PPS), Aguilas Mexicanas (PAM), Frente Liberal Mexicano (FLM), Demócrata Mexicano (PDM), de la Sociedad Nacionalista (PDSN), de la Revolución Socialista (PRS), Unión Nacional Opositora (UNO), Obrero Socialista-Zapatista, Foro Democrático (PFD) y Social Demócrata (PSD).

En total trece, aunque en realidad debería hablarse de 14 organizaciones, ya que la petición de registro condicionado para el PARM se presentó por partida doble. Una solicitud la encabeza como dirigente Carlos Guzmán Pérez y la otra José Ramírez Celaya. Esto no hace más que demostrar que sigue la división interna de esa organización, cuyo decaimiento se acentuó precisamente por rencillas internas, hasta el grado de perder el registro oficial que primero le fue prácticamente regalado, pues para nadie es un secreto que esa organización nació por decreto presidencial.

Como se aprecia, no hay novedades en la lista de aspirantes a convertirse en partidos nacionales. Son mayoría las organizaciones que han tenido participación en diferentes etapas de la vida política nacional, pero que no han podido conseguir o retener la simpatía popular para mantenerse entre los principales actores de la política.

De los que se pueden ubicar en tal condición, el más antiguo es el PPS, fundado por el desaparecido líder sindical y político Vicente Lombardo, cuya hija, Marcela, fue la candidata presidencial de la organización en los comicios de 1994, cuando perdió el registro por no alcanzar 1.5 por ciento de los sufragios. Recientemente falló en el intento de conseguir el registro definitivo, pero en razón de su historia podría obtener el condicionado.

Otra organización que podría concretar su aspiración de participar en las elecciones federales es el Partido Foro Democrático, formado por prestigiados disidentes del PAN. Este grupo tuvo muy poco tiempo para obtener su registro en los comicios de 1994 y esta vez seguramente tendrá en contra las objeciones de sus ex compañeros panistas. A cambio, las fuerzas que no simpatizan con Acción Nacional podrían ayudarles a allanar obstáculos, a fin de que consigan el registro.

La cosecha

Una de las giras que realizará el presidente Ernesto Zedillo durante la primera quincena del presente mes será a Aguascalientes. El último día de abril recibió en Los Pinos al gobernador de ese estado, Otto Granados Roldán, a quien ofreció la colaboración federal para solucionar el problema derivado de unas instalaciones petroleras y para aprovechar en beneficio de los habitantes de la ciudad de Aguascalientes un gran predio de Ferrocarriles Nacionales que no está incluido en la licitación de bienes de esa empresa estatal en proceso de ser privatizada... Desde luego los trabajadores y el pueblo en general no podemos celebrar el ``bienestar de nuestras familias'', a pesar de las declaraciones ``irracionales'' de Fidel Velázquez, pues la situación de la mayoría es hoy desastrosa, afirmó Violeta Vázquez Osorno, quien realiza campaña para ser elegida presidenta del PRD en el Distrito Federal.